Liceu para la igualdad desde la perspectiva de género

Ana Moltó, agente de Igualdad y presidenta del colectivo, asegura que la idea de poner al grupo el nombre de Liceu de Dones surgió en 2010, cuando realizaba un máster de Igualdad en la Universidad Jaume I y a raíz de una reseña sobre un ensayo de José antonio Marina y María Teresa Fuertes, «La conspiración de las lectoras». «En él encontré un grupo de mujeres fuertes, creativas y productivas, coetáneas de Lorca, Buñuel y Dalí, pero a quienes las referencias artísticas de la Generación del 27 no las incluían», explica Ana. «Mujeres como Rosa Chacell, Ernestina Champourcin, María de Maeztu o Maruja Mallo, todas aquellas mujeres modernas, ‘las sin sombrero’, que dejaron de existir a partir de la Guerra Civil porque nadie las nombró nunca más, ni sus compañeros, ni los libros de texto», explica.

Ana resalta que ese grupo de mujeres tenían grandes proyectos que nunca vieron la luz, pero convivieron en un lugar común, el Lyceo Club Femenino de Madrid de los años treinta cuyo objetivo era visibilizar el trabajo y la creatividad femenina de las mujeres de la Generación del 27.

Moltó constata que ahora, como antes, «por razones culturales que se resisten a desaparecer, muchas mujeres ven que sus proyectos son obstaculizados, limitados o, sencillamente, desconocidos».

La presidenta del colectivo remarca que Liceu de Dones optó «por constituir un espacio donde compartir lo que sabemos, para empoderarnos y desarrollar nuestros proyectos». «Entre nuestros objetivos está visibilizar los trabajos de las mujeres, prevenir, combatir y denunciar la violencia contra las mujeres y la defensa de la igualdad entre las personas».

«Somos un grupo de mujeres de diferentes áreas, pero con un denominador común, que es el feminismo. Todas tenemos formación en igualdad», destaca.

Moltó señala que aún resta mucho camino por andar y muchos techos de cristal que romper para alcanzar la plena y real igualdad de la mujer. «Tenemos que llegar a la igualdad real, no solo la formal. Y, por supuesto, eliminar la lacra de la violencia machista y lograr la igualdad salarial».

Sobre la lacra de la violencia machista, la visión de Moltó es nítida: «Esto tiene que parar, y por eso trabajamos. Es un problema que tenemos que erradicar entre todos».

En cuanto a las políticas de igualdad que están llevando a cabo las dos administraciones más destacadas de la provincia, Ayuntamiento de Castelló y Diputación, la presidenta de Liceu de Dones subraya el trabajo ya realizado. «En el Ayuntamiento se trabaja desde hace tiempo con agentes de igualdad, y con una concejalía de Igualdad, es decir, un ente con un presupuesto. Y la Diputación está trabajando en el área rural. Pero no dejaremos de reivindicar».

El grupo trabaja desde mayo de 2012, con picos de mayor o menor actividad. Entre sus actividades, han realizado presentación de libros, conferencias, talleres y charlas. Una de las últimas actividades ha sido una intervención en el Museo de Bellas Artes de Castelló desde una visión feminista para reflexionar sobre las causas por las que durante siglos se ha silenciando también en el arte a la mujer.

Liceu de Dones de Castelló forma parte del proyecto Red Feminista por el Buen Trato (Xarxa Feminista pels Bons Tractes) y, en unión a otras asociaciones de mujeres de Castelló, perfila la efemérides del 25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia de Género. La fecha se eligió en homenaje a las hermanas Mirabal, tres mujeres dominicanas asesinadas en 1960 por el dictador Rafael Leonidas Trujillo.

El colectivo ha organizado dos jornadas antes, el viernes 23, el acto central para conmemorar la cita. El encuentro será en el parque Ribalta, entre las 10 y 17 horas, e incluye danza, talleres, arte urbano y performances.