El Ayuntamiento de Castelló lanza este año la oferta de empleo de relevancia desde 2012 tras suavizarse el plan de ajuste que aprobó el anterior ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. Así, prevé impulsar una provisión con 267 plazas, de las que la mayor parte servirán para consolidar con procesos selectivos puestos que ahora están cubiertos de manera interina. En junio salió una primera convocatoria con 131 plazas y en breve será el turno de una segunda con 137 más, según avanzan fuentes municipales y de la sección sindical de Comisiones Obreras.

El equipo de gobierno puede promover ahora esta oferta de empleo público por el acuerdo alcanzado el pasado marzo entre el Gobierno y los sindicatos, que eliminó las restricciones del programa de austeridad de 2012. Este último plan congeló en la práctica las plantillas de funcionarios municipales al frenar la tasa de reposición en caso de jubilaciones y bajas excepto en las áreas de emergencias (bomberos y Policía Local). De acuerdo con este programa solo se podían reemplazar una de cadas dos jubilaciones. Como consecuencia de ello, el ejecutivo local de Alfonso Bataller aplicó de 2012 a 2016 una amortización de 50 empleos tras jubilaciones. De 2012 a 2017 solo se sacaron 49; en 2012 y 2013 no hubo ofertas de empleo público, en 2014 se aprobaron tres plazas; en 2015, 16; en 2016, nueve; y en 2017, 21.

Las nuevas medidas aprobadas en marzo recuperan la tasa de reposición del 100 % en las Administraciones Públicas si cumplen los objetivos de deuda, reforzándose con un 10 % más en las corporaciones locales. El Ayuntamiento de Castelló intenta con la convocatoria de 267 plazas corregir el desequilibrio ocasionado con los recortes de Montoro. La actual plantilla municipal está compuesta por 1.158 empleados fijos y 500 interinos. El nuevo proceso público pretende sobre todo estabilizar los lugares de trabajo que llevan años en situación de interinidad por las restricciones para impulsar ofertas públicas.

Así, de las 267 plazas, 14 son de nueva creación, mientras el resto son de promoción interna (23), de consolidación de empleo temporal (18) y de estabilización de puestos interinos (213).

La primera oferta publicada en junio contempla la regularización de los 45 agentes de movilidad urbana, unos trabajos que desde su nacimiento están en una situación de interinidad, más 24 de la Policía Local. Respecto a este último cuerpo, se prevé también la creación de dos plazas de agentes de policía y una de inspector. Además, el consistorio ha planificado la contratación de un arquitecto técnico, dos bomberos, un ordenanza y tres celadores.

Esta convocatoria se ampliará próximamente con otras 137 plazas. El inicio de la selección de esta dicha tanda se prevé para primeros de 2019, según las fuentes sindicales.

El equipo de gobierno ha compensado en parte la falta de personal estos últimos años con la contratación temporal de personas en paro a través de diversos planes de ocupación (Jornals de Vila o programas subvencionados por el Servef).