Una semana después de estar la vicealcaldesa, Ali Brancal, en el punto de mira, los partidos que sostienen al actual gobierno local -PSPV, Compromís y Castelló en Moviment- mantuvieron un encuentro para buscar una actuación conjunta que solvente esta nueva crisis entre las fuerzas de izquierdas del ayuntamiento, reunión que dejó patente tras su conclusión que el conficto, lejos de suavizarse, se incrementa.

Los representantes de los tres partidos optaron por el silencio, lo que dice mucho de las diferencias que existen entre las tres formaciones, en especial entre PSPV y Compromís, a la hora de dar una salida a la crisis. Del encuentro de ayer, según las fuentes consultadas, solo hay una cosa clara: Ali Brancal no tiene ninguna intención de dimitir y la alcaldesa, de momento, tampoco de cesarla, esperando que sea Compromís el que dé el paso y, aplicando el Código de Bueno Gobierno del ayuntamiento, recomiende a su concejala Ali Brancal que siga como edil, pero que deje sus responsabilidades en el consistorio.

Como se recordará, Ali Brancal y Enric Nomdedéu, secretario autonómico de Empleo, declararon el pasado 11 de julio en calidad de investigados, ante la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de la capital de La Plana, por presunta malversación y falsedad vinculadas al supuesto envío de propaganda electoral para los comicios europeos de 2014 a través del servicio municipal de correos del Ayuntamiento. La investigación judicial tiene su origen en una querella impulsada por el portavoz adjunto del Grupo Municipal del PP, Juan José Pérez Macián. En su declaración, Brancal y Nomdedéu ratificaron ante el juez que los envíos objeto de la investigación solo contenían el boletín municipal del Grupo Compromís y, en ningún caso, propaganda electoral del partido, como sostiene el PP, en base al contenido de un sobre que ha remitido como prueba al juzgado instructor.

De momento, Compromís ha conseguido dilatar el procedimiento ya que el Juzgado de Instrucción número 2 ha admitido a trámite los recursos de apelación interpuestos por Ali Brancal y Enric Nomdedéu para solicitar la nulidad de las pruebas aportadas por Juan José Pérez Macián. Esto supone que el juzgado, de momento, no dará ningún paso más hasta marzo. En cualquier caso, no quita la condición de investigados que tienen tanto Brancal como Nomdedéu.

La reunión de ayer, solicitada por Compromís, contó con la presencia de Ignasi Garcia y la propia Ali Brancal por esta formación; Rafa Simó y Patricia Puerta por el PSPV y Anna Peñalver por Castelló en Moviment. Una vez concluida ninguna de las partes quiso hablar, acogiéndose a un pacto de silencio entre todos ellos, lo que da a entender entre líneas que la solución conjunta a la crisis, de momento, no existe.

Aunque la investigación ya estaba abierta desde hace meses, el problema se ha agrandado tras el informe emitido el 31 de octubre por la secretaria general del pleno, en el que confirma que Ali Brancal está «investigada». La funcionaria, por ello, señala que «corresponde a la Comisión de Gobierno Abierto y Participación», oída la vicealcaldesa, «informar sobre la aplicación de las medidas que corresponden.

Aquí entre en juego el Código de Buen Gobierno del ayuntamiento, que recoge que cualquier imputado debería dejar su puesto. Compromís, aprovechando que la Ley de Enjuiciamiento Criminal cambió el término de ‘imputado’ por ‘investigado’ meses después de aprobarse el código, insiste que Ali Brancal no está afectada por el reglamento y, por ello, no tiene intención de explicar nada el la comisión del día 22.