El flojo rendimiento en el estadio de la Cerámica está condenando al Villarreal en lo que va de temporada. Es por eso que la prioridad ahora pasa por mejorar esa competitividad como local. No en vano, el equipo de Javi Calleja presenta unos números aceptables como visitante, pero solo hay en LaLiga dos equipos peores como locales. Ganar en casa es ya una urgencia, y la próxima oportunidad asoma en la jornada más cercana, el 25 de noviembre contra el Betis. La recuperación en la tabla, ahora en el balcón del descenso, pasa por la Cerámica.

A veces una temporada se desliza por el filo del alambre. En esos momentos de cara o cruz, al Villarreal le ha salido cruz hasta la fecha. La dinámica sería distinta. En el debut liguero, por ejemplo, el Villarreal salió ejecutando un fútbol de escuela con la Real Sociedad. Gerard Moreno culminó esos minutos con el 1-0, y la afición se relamía con lo que venía. Un equipo que aseaba la pelota desde atrás, con Cáseres como descubrimiento, el toque diferencial de Cazorla en el medio y el colmillo recuperado de Gerard Moreno. Sin embargo, un error defensivo costó el empate, y otro en el segundo acto la derrota. Cáseres se lesionó enseguida, Cazorla está a cuentagotas y Gerard cayó en tremanda crisis.

Son momentos que se escapan muy fácil, y que cuesta que vuelvan. Aún en agosto contra el Girona, otra vez el paseo por el alambre acabó con el Villarreal dislocado. El conjunto groguet había encarrilado el partido con la conexión Gerard-Ekambi. Tras el festejo de rigor, sin embargo, el VAR anuló el gol de Ekambi y el equipo, débil en lo mental todo el año, no se repuso del golpe. No ha estado cómodo el Villarreal en su estadio en toda la temporada.

Los números

No gana el Villarreal en casa. No lo ha hecho en toda LaLiga. Con tres empates en seis partidos, solo hay dos rivales con peores números: el Rayo y el Huesca. Sin embargo, a domicilio acumula más puntos (8) que equipos cabeceros como el Atlético de Madrid, el Espanyol o el Real Madrid. Es la Cerámica la que lastra el vuelo de los de Calleja.

En Europa en casa al menos goleó al Rapid de Viena. Se debe hacer fuerte ante su afición, el submarino, porque de eso depende también el pase en las Copas. En Liga Europa, pase lo que pase en Escocia ante el Rangers, estará en la fase eliminatoria si gana después al Spartak de Moscú en la Cerámica. Igual en Copa del Rey con el Almería, tras el empate del encuentro de ida.

El equipo descansa hoy y mañana y regresa el lunes por la tarde, en la Ciutat Esportiva, a los entrenamientos.