Carmen Prades intentó durante años la exhumación de su padre, Rafael Prades Puerta, sepultado en una fosa del cementerio de San José de Castelló tras ser fusilado en el cauce del río Seco por la represión franquista el 21 de agosto de 1939. Ella vio junto a su madre cómo lo mataban y llegó a gritarle antes de morir: «padre, padre...». Rafael, natural de Villahermosa del Río, le contestó: «hija...». Carmen falleció en 2011 sin poder ver cumplido su sueño. El testigo de su lucha lo recogió su hija y nieta de la víctima, Carmen Arnal.

El equipo arqueológico de ArqueoAntro empezó el martes en el cementerio viejo los trabajos de localización de Rafael Prades, uno de los tres represaliados de Castelló que serán exhumados en una primera fase. Ayer encontró los restos de un cadáver que apunta que son de este vecino de Villahermosa al estar dentro de un ataúd donde se piensa que fue enterrado. Pero los descubrimientos no se han quedado solo con Prades, ya que han sacado a la luz otros dos cuerpos; uno cuya exhumación estaba prevista en una segunda fase, y un segundo que se creía que ya había sido exhumado. Asimismo, han aparecido restos en cajas de otros tres que se consideraba que ya habían sido trasladados al osario.

Las catas arqueológicas en esta primera semana se han centrado en la fila 1 de la sepultura 8, lugar donde las investigaciones de Recerca de la Memòria Histórica sitúan a Rafael Prades. Ayer se halló un cadáver dentro de una caja descompuesta que los investigadores estiman que corresponde a su persona. Los historiadores se han visto sorprendidos al aparecer los cuerpos enteros de otros dos fusilados, uno perteneciente a Vicente Colón, quien los estudios ubicaban en una fila cercana a la de Rafael Prades, y en segundo lugar, a Enrique Devis, que no fue exhumado en su momento como se pensaba. Según la historiadora Queta Ródenas, en la fila 1 se enterraron a 18 personas y en los años 80 se exhumaron a cinco. Enrique Davis debía haber sido uno de ellos pero por error no se trasladó. Por otra parte, han surgido tres cajas con restos de otras personas que, según Ródenas, se creía que estaban en el osario.

Búsqueda de Eduardo Ferreres

ArqueoAntro comenzó ayer por la tarde la cata para extraer el cuerpo de Eduardo Ferreres, en la fila 4, sepultura 27. Más adelante buscarán a José Monfort, el tercer represaliado que se incluye en esta primera exhumación. El proceso se prolongará cerca de dos semanas. Luego los restos se enviarán a la Universidad Complutense para analizar el ADN y determinar la identidad. El campo santo ha recibido la visita de familiares de otros represaliados que han mostrado su interés en sacar de la fosa los cadáveres de sus allegados.