La segunda mitad el juego del Burriana se fue apagando, aunque todavía tuvo algunas llegadas con serio peligro como la protagonizada por Quique Bernat, que reclamó manos en el area visitante al interceptar un defensa un centro hacia atrás. Pero en los ultimos 10 minutos se mascó la tragedia.Ya en el descuento, y pidiendo la hora, dos remates del Huracán consecutivos se estrellaron en el larguero y en el poste cuando ya estaba batido Soriano. Se evitó el empate de puro milagro.