Avisó Calleja en los días previos y la primera réplica del equipo no pudo ser mejor. La histórica goleada al Almería, el contundente 8-0 que abrochó el pase a los octavos de la Copa, llegó en el momento adecuado. Sirve para administrar al equipo una dosis importante de confianza que se complementa con la comprensión idónea de la grada.

El objetivo para el mes clave de diciembre se refuerza: ganarlo todo, en LaLiga y en Europa.

El primero de los partidos que deben cambiar el rumbo de la temporada se juega mañana en el estadio de la Cerámica contra el Celta. Los amarillos son 17.º en la tabla, con un estrecho margen de tres puntos respecto al descenso con más de un tercio de la temporada ya consumido. Antes de entrar en problemas mayores, diciembre es clave para Calleja y el Villarreal. Asumida la derrota lógica a domicilio ante el Barcelona, el submarino tumbó con contundencia al Almería y ahora se centra de nuevo en Liga. Recibe al Celta y viaja al feudo del modesto Huesca (domingo 16). En Europa, entre medias, debe certificar el pase contra el Spartak en casa (jueves 13).

Por esa línea se expresó el jueves Javi Fuego, que regresó de su larga lesión con buenos minutos de juego. «Necesitábamos tranquilidad, este equipo tiene recursos para lograr grandes cosas y somos optimistas. Venimos en buena línea, estamos compitiendo y podemos afrontar bien estas tres finales», indicó el jugador de Pola de Siero.

El futbolista del Villarreal confía en que este resultado les devuelva la confianza que perdieron en el primer tercio de temporada y, personalmente, espera ayudar y aportar al equipo su trabajo para remontar en la Liga.

Buenos precedentes

Lo primero es ganar al Celta, que ha goleado en sus dos últimas visita al estadio de La Cerámica en la Liga. La pasada campaña, en un encuentro disputado en la jornada 35, el Villarreal se impuso por 4-1 y logró tres puntos que le acercaron casi definitivamente a la Liga Europa y acabaron con el sueño continental del equipo gallego. Tres goles del delantero colombiano Carlos Bacca en el primer tiempo encarrilaron el triunfo local, pese a responder el Celta al primero con un tanto de Sisto. El último tanto del choque llegó ya en el descuento de la mano de Castillejo.

Aquella goleada llegó después de que el Villarreal se hubiera impuesto ya por 5-1 en la anterior visita del Celta a su estadio en Primera División.

En total, el balance de las visitas viguesas al Villarreal en esta máxima categoría es de siete victorias locales, dos empates y dos triunfos visitantes. El último fue en la campaña 2015-16 por 1-2 y con un tanto de Nolito en los últimos compases.