Salvo un cambio radical que no se espera, David Gutiérrez no se sentará en el banquillo el sábado, en la visita del Castellón al campo del Peralada. El técnico valenciano está más fuera que dentro. Hoy llega a Castelló José Miguel Garrido, el máximo mandatario, que hasta la fecha ha congelado la destitución del entrenador. El partido ayer era algo más que un partido y la derrota ante el Sabadell apunta a definitiva. El Castellón, en puestos de descenso, ya ha contactado con varios técnicos.

Guti pasó con serio rostro y apesadumbrado por la sala de prensa. «El ambiente es demasiado hostil», dijo, «y no es excusa porque solo he ganado un partido de trece, pero el ambiente generado desde que llegué no ha sido el adecuado. Me hubiese gustado sentir el apoyo de todo el mundo». Ese mismo ambiente espera al que venga. Como ocurriera cuando Guti relevó a Sergi Escobar, el Castellón ha tirado de agenda con antelación. Algunos de los entrenadores contactados son Eloy Jiménez, Josico y Gustavo Siviero.

Eloy Jiménez fue futbolista del Castellón durante dos temporadas. Logró el ascenso a Segunda División en 2005. Colgó las botas en el equipo de su pueblo, el Hellín, y allí comenzó a entrenar. Después ha dirigido a Conquense, La Roda, UCAM Murcia, Mérida y Fuenlabrada. Acumula más de 150 partidos como entrenador en Segunda B. Jugó promoción de ascenso con UCAM y Fuenlabrada.

Otro candidato es Josico. Quien fuera centrocampista del Villarreal es entrenador desde hace unos años. Ha dirigido a Las Palmas, Jumilla, Atlético Baleares y Elche.

Gustavo Siviero, por su parte, fue defensa central en equipos como San Lorenzo, Newell's, Lanús, Mallorca y Albacete, entre otros. Fue una vez internacional con Argentina. Como entrenador, ha dirigido a Atlético Baleares, Murcia, Lleida y Hércules.

Alternativas

La situación en el Castellón no es fácil. Recuerda a la que enderezó Kiko Ramírez (otro entrenador libre) en la temporada 2015-16, con la ayuda de la personalidad de determinados jugadores, y que desembocó en el penalti fallado por Antonio en el play-off de Gavà.

Ayer en sala de prensa, Guti evidenció un estado de ánimo bajo. «La sensación es mala, de impotencia», dijo, «es complicado afrontar partidos así. El equipo ha tenido muchos nervios al principio, y en la segunda estábamos mejor pero se ha vuelto a decidir por detalles». Guti estaba con pocas ganas de explicarse, lógicamente. «Todo lo que diga ahora sonará a excusa. Son muchos partidos. Venimos de perder en Ejea», rememoró.

Preguntado por los cánticos que pedían su dimisión, comentó en plural mayestático: «Tendremos que reflexionar», dijo. «La afición es soberana y entiendo que la gente pida mi cabeza y la de todos», en referencia al director deportivo Juan Guerrero, también discutido tras las bajas y altas del verano.