Ali Brancal tiene los días contados como vicealcaldesa si no hay un giro inesperado de los acontecimientos en las próximas jornadas. Compromís ha mantenido reuniones con PSPV, Castelló en Moviment y Ciudadanos para conseguir dejar solo al PP, pero la documentación aportada esta semana por la formación nacionalista no servirá para que socialistas y Cs cambien su postura. El pleno de esta tarde certificará, con los votos a favor de los 8 ediles del PP y los 4 de Cs, la abstención de los 7 del PSPV y la oposición de los cuatro respectivamente de Compromís y Castelló en Moviment, pedir la aplicación del Código de Buen Gobierno a Ali Brancal y, por consiguiente, activar su destitución.

Ali Brancal y Enric Nomdedéu, secretario autonómico de Empleo, declararon el pasado 11 de julio en calidad de investigados, ante la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de la capital de La Plana, por presunta malversación y falsedad vinculadas al supuesto envío de propaganda electoral para los comicios europeos de 2014 a través del servicio municipal de correos del Ayuntamiento. El problema añadido para Brancal fue que la Secretaria General del Pleno del Ayuntamiento de Castelló, a finales de octubre, emitió un informe jurídico en el que concluía que la vicealcaldesa está inmersa en un proceso judicial en calidad de investigada [antes imputada] por un supuesto delito de malversación, por lo que, en aplicación del Código del Buen Gobierno del consistorio, cabría la posibilidad de obligarle a renunciar a la vicealcaldía y quedarse como concejala sin delegaciones, interpretación que niegan desde Compromís.

Ayer su portavoz en el grupo municipal, Ignasi Garcia, acompañado por dos de sus compañeros en el consistorio, Enric Porcar y Ali Brancal, y por la coordinadora nacional del Bloc, Àgueda Micó, volvió a incidir en que, en el pleno de esta tarde, lo único que se va a votar es defender o no la «gobernabilidad» del ayuntamiento, al insistir en que «no hay ninguna duda jurídica» sobre el hecho de que sobre la vicealcaldesa no se puede aplicar el Código de Buen Gobierno porque no tiene una «imputación formal», que según recuerda Garcia «solo pueden hacerlas jueces o fiscales, y no es el caso».

Por ello, para Ignasi Garcia en el pleno de hoy -a las 17.00 horas- solo habrá una votación «política», donde «los grupos deberemos de decidir si apostamos por la gobernabilidad de la ciudad o, por contra, vamos a hacer el juego al PP, que está intentando evitar que expliquemos todas las políticas que hemos hecho centradas en las personas».

Por su parte, Àgueda Micó garantizó que, «pase lo que pase» en el pleno, la responsabilidad de Compromís continuará encima de la mesa «porque nuestro contrato social es con la ciudadanía de Castellón, por lo que continuaremos gobernando la ciudad». Según Micó, «si una cosa es Compromís es garantía de estabilidad y de lealtad con nuestros socios de gobierno, y lo único que pedimos es reciprocidad y que tengan las mismas alturas de miras y la misma responsabilidad que nosotros».

"Alicia ante el espejo"

También quiso hablar ayer del tema el secretario general del PSPV de la provincia de Castelló, Ernest Blanch, quien aseguró que la aplicación del Código del Buen Gobierno es una cuestión de «coherencia» política, individual y de partido. Según Blanch, el PSPV actuará « con total y absoluta coherencia y cada uno de los partidos se enfrentará a la suya. Es una cuestión de Alicia [en alusión a la vicealcaldesa] ante el espejo», añadió.