Multitudinaria despedida la que tuvo en la tarde de ayer el primer alcalde de la democracia, Ramón Bofill Salomó, que falleció el miércoles a los 85 de edad. La iglesia arciprestal se quedó pequeña en la misa funeral que se celebró a las cinco de la tarde, además de la gente que se quedó fuera del templo.

Alcaldes y exalcaldes de la comarca, así como la corporación municipal y compañeros de partido en el que militaba, PSPV-PSOE, se sumaron al último adiós que le dio la ciudad.

El Ayuntamiento de Vinaròs decretó el miércoles tres días de duelo, las banderas lucen a media asta y con crespón negro, mientras que en todos los actos institucionales u organizados por el consistorio, se guardará un minuto de silencio. Como se hizo anoche en el pleno del mes de diciembre. Asimismo, ayer se dispuso un libro de condolencias en el salón de plenos.

El secretario general del PSPV-PSOE en la provincia de Castelló, Ernest Blanch, mostró su dolor y pena y el de todo el Partido Socialista por el fallecimiento de Ramón Bofill, el primer alcalde de la democracia de Vinaròs, bajo cuyo mandato de 17 años, «la localidad experimentó una transformación histórica que sirvió para mejorar considerablemente la calidad de vida de su vecindario».

El secretario general de País del PSPV-PSOE, Ximo Puig, y el secretario comarcal, Evaristo Martí, también transmitió sus condolencias. Ramon Bofill fue el primer alcalde de la democracia en Vinaròs y gobernó durante 17 años y dos meses.