Uno de los puntos débiles de la presente temporada en el Villarreal CF está siendo la defensa y los errores cometidos han marcado la situación del cuadro amarillo. El submarino encaja goles con demasiada facilidad ya que en pocos intentos sus rivales se ponen por delante en el marcador, situación que condiciona y lastra el rendimiento de los jugadores.

En el cuerpo técnico del Villarreal lo saben y, tanto Javi Calleja antes como Luis García ahora, están intentando subsanar los desajustes defensivos protagonizados por los suyos. De momento, no se está consiguiendo y, sin ir más lejos, el pasado miércoles en el encuentro de la Copa del Rey contra el RCD Espanyol se volvieron a encajar dos goles. Por fortuna, Toko Ekambi y Carlos Bacca lograron empatar en los últimos minutos (2-2), y la eliminatoria se decidirá el próximo jueves.

Pero los datos están ahí y la línea defensiva necesita reajustarse de forma urgente. En los 27 encuentros oficiales que el Villarreal ha disputado en lo que va de temporada en las tres competiciones en las que se encuentra inmerso -Liga, Liga Europa y Copa del Rey-, el equipo solo ha sido capaz de mantener la portería a cero en diez de ellos.

En la competición doméstica son cinco partidos de 18, no habiendo encajado en los encuentros a domicilio ante Sevilla (0-0), Leganés (0-1), Athletic (0-3) y Eibar (0-0). El único partido en casa que Sergio Asenjo no tuvo que recoger el balón del interior de su portería fue en el derbi autonómica contra el Valencia (0-0), evidenciando que en el Estadio de la Cerámica el submarino es más débil si cabe a nivel defensivo.

En la fase de grupos de la Liga Europa, el Villarreal presente mejores registros defensivos. Y es que el plantel amarillo mantuvo su portería a cero en cuatro de los seis partidos diputados: Villarreal-Rapid Viena (5-0), Rapid Viena-Villarreal (0-0), Rangers-Villarreal (0-0) y Villarreal-Spartak de Moscú (0-0). Dos victorias y cuatro empates firmó el plantel de la Plana Baixa (ninguna derrota) para pasar a la siguiente ronda como primero, fase en la que se enfrentará en febrero al Sporting de Portugal.

La Copa del Rey es la competición en la que menos partidos se han disputado -tres-, con un balance de una victoria y dos empates para los villarrealenses, y un solo partido de esos con la portería a cero: la goleada por 8-0 ante la UD Almería. El resto, empate a tres en la ida ante el conjunto almeriense y empate a dos goles contra el Espanyol esta misma semana.

Son, contabilizando las tres competiciones, un total de 33 goles encajados en 27 partidos oficiales (23 en Liga, cinco en la Europa League y cinco más en el torneo copero). Es decir, una media de 1,2 tantos encajados por encuentro disputado.

Abonado al empate

De entre todos los resultados posibles, el empate es el que más veces ha cosechado el Villarreal. Esos 27 partidos oficiales que se han venido disputando desde el pasado mes de agosto se han saldado con seis victorias, 14 empates y siete derrotas, siendo ocho empates en Liga, cuatro en Liga Europa y dos en la Copa.

Sumar de uno en uno es poca renta para el plantel de Luis García, sobre todo en la competición doméstica, por lo que hay que empezar a sumar de tres en tres para remontar el vuelo, salir de la zona de descenso y empezar a escalar posiciones en la tabla. Solo así se podrá eludir un final de temporada en el que nadie quiere pensar ahora mismo.