Betxí está inmerso en la celebración de las fiestas en honor a su patrón Sant Antoni que cuenta con un cartel para todos los gustos en el que, además del fervor y la tradición, tienen cabida la música, las actividades para los escolares, presentaciones de libros, deporte, galas, reconocimientos y mucha marcha. Esta población de la Plana Baixa subraya en tono festivo el mes de enero y los actos por el patrón se extienden desde el 10 de enero hasta el sábado 26, para cerrar con un concierto.

Los primeros en sumarse a las celebraciones fueron los alumnos de los centros educativos de la localidad porque Betxí celebra la peculiar actividad del 'rotllets de Sant Antoni', acto en el que el alcalde, Alfred Remolar, el edil de fiestas y el párroco acuden a los colegios y anticipan lo que sucede por la tarde en la población: hacen una bendición y reparto de rollos, en este caso más pequeños y para este año prepararon más de 900 unidades. La diversión llega de la mano de los niños que en algunos casos acuden con sus mascotas al colegio y en otros con animales de peluche.

Por la tarde se celebró la tradicional procesión que salió desde la plaza de la iglesia y allí mismo se encontró con la bendición de los animales y el reparto de rollos, este año se repartieron alrededor de 4.000. Después recorrió las calles de la población hasta llegar hasta el barrio de Sant Antoni donde estaba ubicada la hoguera a la que caballistas, mascotas, carros y personas dieron la vuelta como mandan los cánones.

Hoy se celebra el acto estrella de la fiestas del patrón: la romería y por ello los habitantes se reunirán en masa en la calle con el nombre del santo para dar inicio a la misma y emprender dirección a la Muntanyeta de Sant Antoni; la imagen del santo recorrerá el camino portada con fervor; la buena conversación, las risas y la alegría acompañarán a los peregrinos; y la organización agasajará a los romeros con 'coqueta de sal i oli' para que la cuesta se haga menos empinada. Al coronar la cima los bailes populares recibirán a la romería y los participantes de la misma se expandirán por toda la dimensión del lugar y se pondrán 'manos a la obra' para preparar el tradicional asado y celebrar en familia y con amigos.