«Cada crimen [machista] es un fracaso y evitarlo es nuestra obligación». Emilio Romero, comisario jefe provincial de Castelló, no se de anduvo ayer por las ramas a la hora de visibilizar su compromiso con las mujeres víctimas de la violencia de género. La lucha contra la lacra de la violencia machista, la protección de los colectivos más vulnerables y en riesgo de exclusión, el combate contra la ciberdelincuencia y las mafias que tratan con seres humanos, fueron los ejes que centraron el discurso de máximo responsable del Cuerpo Nacional de Policía en la provincia de Castelló en el acto oficial de toma de posesión del cargo, celebrado en la Subdelegación del Gobierno en Castelló.

Emilio Romero (Cádiz, 1961) tomó posesión oficial del cargo en un acto en el que estuvo arropado por el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Fulgencio, la subdelegada del gobierno en Castelló, Soledad Ten. Romero, que ya había ocupado el cargo de comisario jefe provincial en dos ocasiones anteriores aunque de manera provisional, recibió el bastón de mando como comisario jefe provincial de manos del Comisario Jefe Superior de la Comunitat Valenciana, José Javier Cuasante.

Romero arrancó su intervención remarcando su compromiso para«proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades de los ciudadanos y garantizar su seguridad. «Es un día de emoción y satisfacción personal, pero también tengo que decir que es un día importante para visibilizar mi compromiso de trabajo junto con todos los miembros de la policía nacional de la provincia», añadió.

Objetivos

El comisario jefe provincial subrayó que uno de los objetivos de su gestión será la lucha contra la violencia de género. «Debemos hacer un esfuerzo añadido en la lucha contra la violencia de género. Priorizar la atención a todas las víctimas de la violencia de género con el personal especializado y próximo de las unidades de familia y con la implicación de todos los agentes, asumiendo la gravedad del problema desde la necesaria perspectiva de género de género», explicó. «No hay excusas. Sin duda se necesitarán más recursos y coordinación entre los diversos actores implicados, pero ante el reconocimiento de la gravedad debemos afrontarla con coraje y determinación, con empatía con cada una de las mujeres víctimas, con prevención y gestión eficaz y con el convencimiento de que se va a conseguir», añadió.

Retos

Tras este posicionamiento nítido en la lucha contra la violencia machista, Romero enumeró otros retos de la Policía Nacional. «Intensificar aún más la protección de las personas en riesgo de exclusión social, de las víctimas de los delitos de odio y discriminación y de la trata de seres humanos. Tenemos que perseguir a las mafias que se benefician de la vulnerabilidad d des estas personas, en ocasiones obligadas a abandonar sus lugares de origen», aseveró.

Romero indicó que otro pilar de su mandato será la lucha contra los delitos cometidos en el ciberespacio. «Tendremos que seguir avanzando en la formación de nuestros policías para ser eficaces, pero también hacer un esfuerzo en la prevención, informando a los usuarios de las redes de los peligros que se derivan de un uso inapropiado de las mismas».