El fuerte viento registrado ayer por segundo día consecutivo en la ciudad de Castelló ocasionó una treintena de incidencias por caídas de ramas a la vía pública, vallas y marquesinas con riesgo de desplomarse y desprendimiento de cascotes y, desde el miércoles, se han realizado un total de 64 servicios en la ciudad. El consistorio ha cerrado por seguridad el parque Rafalafena y el del Pinar y se han realizado doce servicios por ramas caídas, siete por peligro de caída de vallas y marquesinas y seis relacionados con caídas de cascotes. Las temperaturas no fueron excesivamente bajas, pero precisamente por el viento la sensación térmica fue de mucho frío. En Fredes la sensación térmica fue inferior a -10. En Nules también se registró la caída de un árbol en el parque Botánico.

La nieve también ha llegado al interior. Varios municipios de Els Ports y el Alt Maestrat vivieron durante la jornada de ayer la primera nevada del año. En municipios como Vilafranca, según los datos proporcionados por Ignasi Llopis, observador local, se acumularon 12,8 litros por metro cuadrado, algunos de ellos en forma de nieve.

Las rachas de viento llegaron a los 84 km/h y la mínima fue de -0,5 grados. Asimismo, localidades como Castellfort o Ares también amanecieron ayer con una fina capa de nieve y hielo. Y es que durante la noche del jueves se acumuló una precipitación de 10 litro por metro cuadrado.

La acumulación de nieve y creación de placas de hielo fue un impedimento durante la mañana para el tránsito de vehículo. Así, la quitanieves del Ayuntamiento de Vilafranca trabajó en la limpieza de viales y echando sal sobre el asfalto y a medida que avanzó la jornada se restableció la normalidad en el tráfico en las comunicaciones de Vilafranca con Castellfort, Ares, Benassal, Iglesuela y Cantavieja. Y es que en el caso de Ares, la capa de hielo y nievo obligó a la Guardia Civil a restringir el paso de vehículos pesados durante la mañana, una situación que mejoró gracias a las quitanieves. También se vio afectado el servicio de autobús escolar hasta Benassal que no pudo circular en el servicio matutino. Los padres llevaron a los niños y niñas al colegio y, por la tarde, se restableció el servicio de autobús.

Por su parte, el Consorcio Provincial de Bomberos de Castelló movilizó cuatro máquinas quitanieve-salero para retirar la nieve y esparcir sal en algunas carreteras de la Tinença de Benifassà y Els Ports. Además, la N-232 en Morella permaneció cortada al tráfico a primera hora de la mañana.