El castellonense Andrés Artuñedo se estrenará tarde este 2019, en el que busca reengancharse de una vez por todas a la ATP. El jugador provincial explicaba que su debut se produce casi en el cierre de enero por «el cambio de sede de entrenamiento a última hora. Ahora vivo el día a día en la Academia Dectra de Valencia, junto a mi entrenador, Borja Uribe. Esto ha alterado las primeras semanas del año».

El tenista habla tras un entrenamiento en las instalaciones de Peñacañada. Con 25 años, Artuñedo, que contó con la oportunidad de colarse en la élite, busca mantener las buenas sensaciones del pasado curso. Algún desacierto organizativo y una inoportuna lesión le privaron de pelear con los mejores del mundo, pero retornó el año pasado con cuatro títulos Futures de los trece que luce en su vitrina. Además, cosechó buenos resultados en el dobles. Ahora retorna a trabajar con ilusión.

En la actualidad, Artuñedo figura en el puesto 17 del Transition Tour, el nuevo ranking que facilitará la entrada de nuevas promesas al circuito ATP. El jugador castellonense asegura que esta clasificación es una ayuda y cree que ha llegado la hora de dar el do de pecho para saltar al circuito más importante a nivel mundial. «En el nuevo ATP Challenger Tour, te sientes más importante y juegas en escenarios más profesionales, con hospitalidad, sin previas largas. Existe un mejor reparto de premios y, aunque encuentras más competitividad, creo que aquél que trabaje, se esfuerce, y al que le acompañe la suerte, tendrá oportunidades de pasar rondas y escalar en la clasificación mundial».

Arranque de la competición

En comunión con su equipo, formado entre otros por José Luis Aparisi, Toni Gil, Oscar Montañés, ha diseñado un calendario que comienza esta semana en Túnez. Proseguirá en Budapest (Hungría), Cherburgo (Francia), Bergamo (Italia) y finalizará en la localidad gala de Pau. «De momento, Europa, hay buen nivel. Ya conozco muchos torneos, y valoraremos los primeros resultados, pero la pretemporada está siendo dura, tanto técnica como físicamente, para comenzar con posibilidades de victorias», comenta el castellonense.

Con respecto al tenis provincial, opina que contar en casa con tenistas de la talla de Sara Sorribes, Roberto Bautista o Dani Gimeno, da difusión al deporte de la raqueta y ayuda a la base a seguir entrenando. «Nadie sabe el gran esfuerzo que han realizado para llegar a la élite. Hay que dejar de lado muchas cosas, y vivir tenis, cien por cien. Y aún así, las dificultades son muchas, pero vale la pena intentarlo. Animo a los jóvenes que viajan a circuitos nacionales y europeos a trabajar mucho, conseguir experiencia y perseverar».En unos días, preparando las maletas.