El Villarreal CF recibe este domingo al RCD Espanyol en el Estadio de la Cerámica con un único objetivo: ganar. Tras una semana convulsa, marcada por el cambio de entrenador y el regreso de Javi Calleja al banquillo, el plantel villarrealense quiere demostrar su mejoría con una victoria que les dé confianza para los siguientes compromisos y que mantenga la fe en la permanencia en Primera.

En principio, el catalán es un rival asequible aunque nadie en el entorno del club de la Plana Baixa quiere confiarse puesto que fue ese mismo equipo el que les eliminó de la Copa del Rey. Sin embargo, los de Rubi tampoco se encuentran en un buen momento en la competición doméstica.

De hecho, las trayectorias de ambos equipos son similares esta temporada y más aún en las últimas diez jornadas, cuando amarillos y pericos solo han sido capaces de sumar una victoria. El submarino, penúltimo en la clasificación con 18 puntos, lleva tres victorias, nueve empates y nueve derrotas. Presenta 21 goles a favor y 29 en contra, y acumula ocho jornadas consecutivas sin conocer la victoria.

Su último triunfo data del pasado 25 de noviembre, cuando se ganó al Real Betis por 2-1 en La Cerámica. Despué de esa victoria ha habido cuatro derrotas -Barcelona (2-0), Celta (2-3), Getafe (1-2) y Valencia (3-0) y cuatro empates -Huesca (2-2), Real Madrid (2-2), Eibar (0-0) y Athletic (1-1).

El Espanyol, por su parte, llegará este fin de semana a Vila-real después de ser eliminado en la Copa del Rey el pasado miércoles y en la décimo quinta posición de la clasificación con 24 puntos. Presemnta siete victorias, tres empates y once derrotas, con 23 goles a favor y 34 en contra. Actualmente lleva tres jornadas sin ganar: contra la Real Sociedad en Anoeta (3-2), contra el Eibar en Ipurua (3-0) y contra el Real Madrid en casa (2-4).

Su último triunfo llegó el pasado 4 de enero, cuando los espanyolistas vencieron en casa al Leganés por 1-0. Antes acumuló otras seis derrotas que le pusieron contra las cuerdas: Sevilla (2-1), Girona (1-3), Getafe (3-0), Barcelona (0-4), Betis (1-3) y Atlético de Madrid (1-0).

Vistas ambas trayectorias, y teniendo en cuenta que seis puntos son los que separan a unos y otros en la clasificación, el encuentro del domingo en el feudo villarrealense se antoja clave para los intereses de ambos. Más si cabe para los del Villarreal, que necesita imperiosamente la victoria para empezar a recortar puntos respecto a la zona de la salvación y meter a otro club en la pelea por la permanencia.

El encuentro de este fin de semana contra el Espanyol y el del próximo contra el Real Valladolid a domicilio (viernes 8 de febrero sa las 21.30 horas en Zorrilla) son dos partidos que marcarán el futuro del equipo de Javi Calleja. Ganarlos permitiría afrontar el futuro con algo más de optimismo, pero si el submarino no logra imponerse a estos dos rivales quedará prácticamente condenado al descenso y sin capacidad de reacción alguna.