El Almazora por fin ganó lejos de casa, aunque le costó mucho poder conseguir el triunfo. Lo hizo ayer en el campo del Alqueríes gracias a un solitario gol anotado por el central Rober Jiménez, desde el punto de penalti, al filo del descanso. Los almassorenses de Juanjo Edo no ganaban a domicilio desde el pasado 30 de septiembre cuando arrancaron los tres puntos del campo del San Pedro (0-1). No fue un partido fácil dado que los alquerienses se han reforzado muy bien en las últimas jornadas y están en alza, pero no pudieron igualar en el segundo tiempo. En la segunda parte hubo mucha emoción porque los locales pusieron toda la carne en el asador y el Almazora no era capaz de apuntillar a su adversario, pero al final los blanquinegros se llevaron los tres puntos de la Ciudad Deportiva de Alqueries. Este triunfo permite a los almassorenses seguir en la segunda posición del grupo.