En los malos momentos se necesita que los jugadores con galones den la cara. Asuman el mando y den un golpe sobre la mesa para motivar a sus compañeros. Y eso es lo que precisamente hizo ayer Bruno Soriano por petición propia. El capitán del Villarreal CF pidió comparecer ante los medios para hablar de su estado de salud y también para alentar a los suyos en un momento tan delicado como el que vive el equipo actualmente, inmerso en la lucha por la permanencia en Primera.
El centrocampista de Artana, alejado de los terrenos de juego desde hace un año y ocho meses (cayó lesionado en Mestalla el 21 de mayo de 2017), usó términos como el de «pesadilla» y «calvario» para referirse a la lesión en su rodilla e insistió que ya no puede marcarse plazos para volver porque le resulta «frustrante». «Me operé hace año y medio (el 3 de julio de 2017) y las cosas se han ido complicando hasta hoy. Ahora tengo una molestia en el tendón rotuliano que me impide entrenar y avanzar. Estamos tratándolo de la mejor manera posible y con los mejores médicos ya que el objetivo es volver cuanto antes», confesó.
«No sabéis lo que sería para mí poder entrenar normal, ya no jugar, solo entrenar con mis compañeros. Ese día para mí será lo más grande, ese día tiraré una traca», bromeó el futbolista, quien aseguró que «ver los partidos desde la grada o desde casa cuando todos están jugando es muy duro. Sobre todo al saber que eres un jugador importante del club y no poder ayudar».
El Villarreal ha perdido a su líder en el centro del campo desde que no está Bruno y es algo que le frustra aún más si cabe al jugador, cuyo papel ahora ha pasado a ser un líder en el vestuario pero no dentro de los terrenos de juego. «Yo no estoy aquí para decirles a mis compañeros cómo tienen que jugar. Yo intento ayudar a la gente más joven, dar apoyo al grupo antes de los partidos... Para eso también soy el capitán y he de responder en ese sentido aunque lo que me gustaría sería estar dentro del campo», explicó.
Bruno, que ya sufrió en su día el último descenso a Segunda, dejó claro que «somos conscientes de la situación» y apostilló que «estamos a tiempo de corregir esa racha tan mala entre toda la familia del Villarreal. El club nos ha dado su apoyo y ahora tenemos que actuar nosotros dentro del campo». «Ojalá algún compañero pueda sentir esa llamada de dar un paso adelante y asumir esa capacidad de liderazgo poco a poco. Hay jugadores muy importantes dentro del equipo para hacerlo», sentenció el capitán, quien pidió a la afición que esté al lado del equipo en estos momentos para sacarlo adelante entre todos.
