con la exposición del Ninot que se inaugura este jueves, se inicia la programación de las fiestas josefinas en Borriana. En realidad esta exposición que cuenta con la posibilidad de que a un artesano se le indulte un ninot, cuenta con cierto interés para los falleros de comisión que son seguidores del apartado artístico que tienen esta fiesta, y que no son otros que los monumentos llamados fallas. En la exposición del Ninot se suelen apreciar tendencias artísticas de los artesanos, también del trabajo que están realizando actualmente, la forma de trabajar e incluso si tienen el trabajo terminado o tienen que apurar las largas jornadas laborales trabajando hasta el día de la plantà, para poder cumplir con los compromisos adquiridos, aunque son muy importantes las nuevas tecnologías las más avanzadas formas de desarrollar este trabajo. Sin embargo, a los técnicos o críticos en ocasiones les motiva más la pintura que el diseño, que hoy en día se desarrolla con máquinas.
Aunque las distintas fallas que se plantan en Borriana se dividen y se premian por categorías, según el presupuesto económico que cada artesano tengan para realizar el monumento, en la exposición del Ninot solamente se elige un muñeco o grupo, el cual se indulta del fuego y posteriormente se guarda. En los noventa años de fallas en esta ciudad los muñecos indultados no se han guardado en su totalidad, es más no creo que se tengan unos veinte, y en la actualidad esta situación pude cambiar dado que las fallas ya cuentan con un museo y un espacio para guardar los muñecos indultados y poderlos mostrar a cuando se visite el museo.
En los últimos años los artesanos han mostrado más calidad en los muñecos infantiles que en los grandes, posiblemente porque las fallas infantiles cuentan con presupuestos más adecuados a las categorías en las que participan. Desde la inauguración de la exposición del Ninot hasta el día de la cremà de las fallas hay un mes en que desde el municipio de Borriana se tendría que cursar una invitación a asociaciones culturales y colegios, invitándoles a visitar el museo fallero, en el que se puede apreciar el proceso de la construcción de las fallas, así como todas las actividades que alrededor de esta fiesta se desarrollan a lo largo del año, una promoción que podría estar acompañada con la visita de algún que otro taller, siempre que el artesano lo permita, porque si tiene el trabajo controlado o terminado no dudará en ofrecer el taller para esta actividad, la de promocionar las fallas.
