El Castellón cayó en la cuarta jornada a la zona de descenso y no ha sido capaz de salir de ahí. Meses lleva compitiendo con ese lastre emocional, siempre a uno o dos triunfos de la meta. En la previa de la visita al campo del Cornellà, uno de los más difíciles del grupo, el entrenador albinegro Óscar Cano pidió a sus jugadores que no se rindan, que insistan, porque «en algún lugar está la orilla que tanto anhelamos». «Debemos seguir remando», dijo

El conjunto orellut es ahora mismo penúltimo, empatado con el colista Mestalla. Está a tres puntos del play-out por la salvación y a cinco de la permanencia. A trece jornadas para el final, la situación es complicada pero no concluyente. Preocupa más el cambio de sensaciones de las últimas semanas. «Veníamos de una inercia positiva», desgranó ayer Cano en sala de prensa, «pero la dinámica se quiebra por un mal marcador, el del Espanyol B (1-2 en Castalia)». «Ahí nos podemos quedar con lo que hicimos mal, un momento en la primera parte, o lo que hicimos bien, el resto del partido, pero como venimos de una experiencia previa negativa, la gente se esconde en el pesimismo». Contra eso quiere luchar el entrenador, que es optimista: «En muchos momentos hemos sido mejores que los rivales». «Queda un mundo, pero tenemos que empezar a ganar ya», sentenció.

El rival

El partido de mañana es uno de los más duros que quedan a domicilio. El Cornellà es el cuarto mejor local del grupo y solo ha perdido dos partidos en casa. Un reto de altura para el Castellón, que a su vez es el peor visitante del grupo y todavía no ha ganado a domicilio. «En cuanto al Cornellà, ahí están los resultados», dijo Cano, «es un equipo construido desde la superficie, desde el campo que tienen para jugar en casa. Son fuertes a partir del juego directo, con dos delanteros que nos van a exigir estar muy atentos, pero también propone fútbol». Cano señaló la «inteligencia» del Cornellà a la hora de construir su proyecto de juego, y destacó también un dato: «Casi el 70 % de sus goles se originan en acciones a balón parado, de manera directa o indirecta».

El Castellón recuperará al interior Jamelli, que se perdió el duelo con el Teruel por una cláusula en el traspaso. El pivote Marc Castells se une por lesión a las bajas de Pablo Roig y Kilian, que en principio seguirán fuera. «Es verdad que contra el Teruel tuvimos bajas importantes. Posiblemente con esas ausencias debí haber jugado de otra manera la segunda parte, priorizando la defensa, y asumo la responsabilidad», afirmó Cano. «Los lesionados son importantes, por eso están en la plantilla, pero no podemos escudarnos porque los que están disponibles están capacitados para ganar a cualquiera», finalizó.