Abrió sus puertas en 2006 y, desde entonces, el Museo del aceite de Segorbe trabaja día a día para la promoción y difusión de la cultura y el cultivo de uno de los tesoros más destacados en la comarca del Alto Palancia: el aceite. Muestra de ello es que este centro museístico recibió el primer premio nacional a la promoción y difusión de la Cultura oleícola en 2008 como recompensa al trabajo bien hecho.
Como gestores de este edificio municipal, los guías oficiales de turismo de la Comunitat Valenciana, Teresa Blasco y José Luis Calpe, que cuidan con todo detalle las instalaciones para que los visitantes puedan acercarse un poco más y conocer una de las tradiciones más arraigadas en el Palancia.
La visita que hoy nos ocupa nos adentrará en este Museo dedicado al oro líquido. Enclavado en pleno casco antiguo de Segorbe, si viajamos en coche, accederemos hasta la población o bien desde Valencia o bien desde Castelló por la Autovía mudéjar A-23. Se recomienda aparcar por el núcleo urbano para ir callejeando por las recoletas y estrechas calles del casco antiguo hasta las inmediaciones de este Centro ubicado en la plaza de la Belluga, número 1.
El precio de la entrada tiene un coste de tan solo dos euros para adultos y un euro para grupos y jubilados, mientras que los niños hasta 12 años pueden entrar gratis. El edificio cuenta también con un complejo rural de apartamentos con encanto donde poder pernoctar.
Ubicado en una antigua almazara conservada y adaptada al centro de interpretación, el Edificio Belluga recoge la esencia y la tradición oleícola, la cultura milenaria del aceite, su elaboración y la esencia mediterránea que solo un cultivo como el olivo trasmite al conocer su historia.
Salas expositivas
Con varias salas expositivas, el recorrido se inicia con la proyección donde, durante unos minutos, el espectador puede conocer de forma muy gráfica y visual el origen del aceite en la antigüedad, hace más de 7000 años. Un cultivo que creció alrededor del Mediterráneo en Siria y Palestina y que, gracias al clima, se fue extendiendo por la franja mediterránea.
Tras conocer los orígenes, la siguiente sala da una muestra del proceso de la recolección. A través de paneles interactivos que nos irán acompañando en cada espacio para darnos las explicaciones pertinentes, la sala cuenta con la almazara original tal como estaba en los años 50. Las muelas de piedra, pasando por la prensa con el esparto y los utensilios tradicionales utilizados para la elaboración del aceite se pueden ver y tocar en este espacio que nos adentra al momento de la recolección y producción del proceso tradicional.
Continuaremos la visita por el Museo del aceite de Segorbe en una tercera sala en la que conocer la evolución hasta la actualidad de como se han desarrollado los anteriores procesos, para acabar, al final de la visita, conociendo la diferencia entre los distintos tipos de aceite y los beneficios del aceite de oliva virgen extra para la alimentación y la salud.
Por otro lado, junto con la visita al museo, se puede concertar una cata de aceites realizada por un experto en la que conocer más los aceites distintivos y de excelente calidad de la línea Belluga Gourmet, elaborados por ellos mismos y deleitar al paladar con la línea de ricos productos artesanos de elaboración artesanal. También cuentan con su tienda especializada de productos que da servicio de venta de aceites y productos relacionados con el oro líquido.
El museo del aceite de Segorbe es, en definitiva, un mundo de impresiones amarillas, verdes y ocres deslizándose por paredes de luz entre historias del hombre, donde el aceite representa la esencia de la sabiduría.
