Los últimos datos de la brecha salarial publicados ayer por los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) evidencian que la igualdad de los sueldos está lejos de erradicarse. Según el informe, las mujeres trabajadoras de Castelló cobran 6.192 euros menos que los hombres y la franja de edad en la que la brecha es más acusada es en mayores de 65 años.

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Asimimo, el área geográfica con mayores desigualdades en la Comunitat Valenciana sería Castelló, donde las mujeres cobran un 42,5 por ciento menos. En el otro lado de la balanza, la menos desigual sería Alicante, una provincia en la que aun así las mujeres cobran un 23,7% menos.

La estadística recoge que, a medida que la mujer va cumpliendo años, la diferencia entre el salario de la mujer y del hombre va incrementando en detrimento de la mujer. Así, en las mujeres trabajadoras menores de 18 años la brecha salarial es de -1.258, es decir, cobran 1.258 euros menos que los hombres. En la franja de edad de 18 a 25 años las mujeres cobran 2.577 euros menos; de 26 a 35 años la brecha salarial es de -4.735; de 36 a 45 años la diferencia salarial es de 5.829 euros; de 46 a 55 años asciende a 7.788 euros; de 56 a 65 años la brecha salarial es de -8.198; y, por último, las mujeres mayores de 65 años cobran 13.699 euros menos. Los cálculos de Gestha demuestran que la brecha salarial aumenta con la edad, intensificándose en las edades donde se concentra la maternidad y el cuidado de los mayores.

Además, según el mismo estudio 45,5 por ciento de las mujeres ocupadas en la provincia de Castelló tiene un sueldo inferior al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), establecido en 900 euros.

Los Técnicos de Hacienda explican que las causas de la brecha salarial se deben, por un lado, a que las mujeres ocupan mayoritariamente los trabajos más precarios, con jornadas parciales y sueldos anuales por debajo de los 7.400 euros. Por otro, al techo de cristal, ya que a partir de los 60.000 euros anuales apenas copan un tercio de los puestos de trabajo, desplomándose a casi dos de cada 10 trabajadores en el top salarial con ingresos de más de 126.000 euros, donde además la brecha salarial de las mujeres más cualificadas se acrecienta hasta los 18.000 euros anuales, un 14,3 por ciento de su sueldo medio.