Dos centenares de personas participaron ayer en la plaza Mayor en una concentración convocada por el Ayuntamiento de Castelló para mostrar su repulsa contra las agresiones sexuales registradas durante Magdalena. A la protesta, organizada con el lema «no es no», se sumaron la reina de las fiestas, Natalia Palacio; Na Violant, Andrea Sánchez, y sus dones de companya; la presidenta de la Junta de Festes, Noelia Selma; el conseller de Educación, Vicent Marzà; la alcaldesa de la ciudad, Amparo Marco; y concejales del PSPV, Compromís, Partido Popular, Castelló en Moviment y Ciudadanos y EU.

Un manifiesto fue leído por el conseller de Educación, la alcaldesa, los regidores Ignasi Garcia, Verònica Ruiz, Omar Braina y Vicent Sales, la reina y Na Violant. «La sociedad está concienciada, pero hemos de hacer más esfuerzos para rechazar cualquier tipo de comportamiento sexual contra la voluntad de las mujeres. Desde la sociedad en general y desde el ayuntamiento en particular exigimos tolerancia cero ante las agresiones sexuales. Las mujeres queremos de dejar de ser víctimas, queremos ser respetadas como personas y como ciudadanas de pleno derecho. Pedimos respeto para poder ejercer la libertad, para ser libre», afirmó parte del texto, que concluyó señalando que «ni un paso atrás; al contrario, hay que hacer muchos pasos adelante para acabar con la violencia contra las mujeres».

Los asistentes corearon frases como «serena o borracha quiero llegar a casa»; «con ropa o sin ropa mi cuerpo no se toca» y «si tocan a una nos tocan a todas».

La alcaldesa realizó unas contundentes declaraciones en las que pidió al poder judicial que reflexione y no aplique solo «la legalidad rigurosamente», porque, indicó, el último caso de Castelló «es consecuencia de la sentencia de la manada». Marco pidió también al legislativo y al Gobierno que «haga caer todo el peso de la ley» a los condenados por violencia machista, incluso, remarcó, que «haya más peso de la ley» y «que se reforme lo que se tenga que reformar».

La vicepresidenta y consellera de Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, afirmó que hay que apostar por una mayor educación sexual: «Tenemos un problema porque muchos adolescentes, a falta de educación sexual, tienen una educación a través de la pornografía y las redes sociales y eso se debe comenzar a regular».