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Pleno

La diputación frena las mociones contra las contratas del balneario de Benassal y la piscina

El gobierno provincial del PP hizo valer su mayoría absoluta para frenar la ofensiva de los grupos de la oposición que pedían revisar los términos de la primera concesión y rebajar las tarifas en el caso de la piscina provincial.

Las concesionarias que gestionan dos de las instalaciones más relevantes propiedad de la Diputación de Castelló, a saber, el balneario de Benassal y la Piscina Provincial, coparon ayer el pleno ordinario de la corporación provincial. El gobierno provincial del PP hizo valer su mayoría absoluta para frenar la ofensiva de los grupos de la oposición que pedían revisar los términos de la primera concesión y rebajar las tarifas en el caso de la piscina provincial.

El debate sobre la contrata que gestiona el balneario de Benassal, a través de la mercantil Balneario de Montanejos, se produjo a raíz de una moción presentada por los grupos de Compromís, PSPV y Castelló en Moviment (CseM). Los tres grupos políticos de la oposición en la corporación provincial coincidieron en señalar que la empresa está incumpliendo el contrato en uno de los puntos clave, el periodo de apertura. Ese aspecto, junto con el de los servicios prestados, decantó finalmente la adjudicación del contrato en 2011 en favor de la mencionada mercantil y en detrimento de la segunda firma que aspiraba al concurso, la UTE Via Latina.

Los portavoces de estos tres grupos indicaron que la mercantil abre al público tres meses al año cuando a estas alturas de la concesión debería estar abierto al menos nueve meses.

El portavoz del Grupo Socialistas, Santiago Pérez, recordó que la concesión está denunciada en los tribunales por parte del Gremio de Hoteleros de Benassal y reclamó un informe jurídico para determinar si realmente la empresa cumple o no los términos del contrato en ese apartado. El portavoz de Compromís, Xavi Trenco, abundó en la misma tesis y exigió al gobierno del PP que abandone su ambigüedad y se defina claramente sobre la gestión del servicios. Mientras, el diputado provincial de CseM, Iñaki Vallejo, apuntó a «intereses oscuros» y pidió una «gestión transparente bajo criterios de eficacia no solo económica, sino también social».

Las criticas y censuras de la oposición a la gestión de esta infraestructura de la diputación fueron rechazadas por el vicepresidente primero de la corporación, Vicent Sales, del PP, quien indicó en primer término que «ninguno de los dos informes emitidos hasta ahora, uno de los técnicos de la corporación y otros por parte de la Universitat Jaume I afirman que la concesionaria haya incumplido los términos del contrato en el apartado de periodo de apertura», precisó.

Mientras, el debate sobre la contrata de la piscina provincial surgió tras una moción de Compromís, que solicitaba rebajar en un 50% los precios. La iniciativa fue rechazada por el PP que la tildó de «electoralista y extemporánea».

Por otra parte, en el pleno de la diputación de ayer tomó posesión del acta de diputada provincial Carmen Martinarravaro, del PSPV, en sustitución del dimitido portavoz del Grupo Socialista, Antonio Lorenzo.

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