Begoña Carrasco impulsará una renovación a medias en la candidatura que encabezará en las elecciones municipales del 26 de mayo. Como nuevos fichajes apuntan Maica Hurtado, Susana Fabregat, Sergio Toledo y Juan Carlos Redondo, mientras se caerán históricos como Javier Moliner y Juan José Pérez Macián. Seguirían, según avanzan fuentes del partido, Vicent Sales, Carlos Feliu, María España y Vicente Guillamón, además de la propia Carrasco.
Vicent Sales será el número dos de Carrasco y luego disputará la presidencia de la Diputación de Castelló. Carlos Feliu también ocupará un puesto destacado.
Salomé Pradas dejará el consistorio para centrarse en el Senado. Juan José Pérez Macián, que entró de concejal en 2003, da el salto a la candidatura del Congreso, en la que ocupa el puesto número dos. Mientras, Javier Moliner se autodescartó tiempo atrás tanto para el ayuntamiento como para la diputación.
El PP cuenta en la actualidad con ocho actas. Por detrás de Carrasco y Sales, irían Toledo, Redondo, Hurtado, Feliu, España, Fabregat y Guillamón. Se desconoce el orden y algunos de los citados iría en el número 9, cuya elección se atisba complicada
Las nuevas incorporaciones forman parte en la actualidad del núcleo de confianza de Carrasco en el partido. Maica Hurtado es abogada; Susana Fabregat es periodista y trabajó en el gabinete del grupo municipal; Juan Carlos Redondo es consultor y fue nombrado en 2017 por Carrasco como auditor interno del PP; y Sergio Toledo es el secretario general de la agrupación municipal.
Carrasco ha tenido libertad total para conformar su propia candidatura. Accedió en 2011 a la corporación municipal de la mano de Alberto Fabra. En su primer mandato fue concejala de Deportes, y tras la derrota del PP en 2015 fue designada portavoz popular.
El apoyo de Carrasco Pablo Casado en las primarias del partido ha incrementado su ascendencia en el seno de la organización y ha eludido posibles intromisiones de la dirección del PP provincial que dirige Miguel Barrachina.
Asimismo, la alcaldable popular de Castelló ganó el pulso a Barrachina al conseguir que Salomé Pradas encabece la candidatura de la Cámara Alta frente al intento de serlo del dirigente provincial irá finalmente a las Corts Valencianes.
