Decir que la humanidad avanza a un ritmo frenético suena ya a cliché, pero es complicado separarse de esa incertidumbre creciente que supone el concepto 'futuro'. Estamos en los tiempos en que se reabre, más vivo que nunca, el debate de la renta básica, del papel del ser humano, del cambio de sistemas de producción y tan complicado es separarse de ese miedo como recolocar el papel del nuevo ser humano como una entidad, cada vez más, de consumo, más que de producción. Y es precisamente por este motivo por el que la fundación Low Carbon Economy de la Vall d'Uixó apuesta por una nueva economía basada en la convivencia sana con el entorno, la llamada economía verde.
La fundación ha financiado y organizado un intercambio que se ha llevado con los alumnos del IES Botànic Cavanilles de la localidad. En este intercambio, que ha formado parte de un programa Erasmus entre alumnos de intercambios de institutos de secundaria de Italia, Croacia, Francia y España se ha trabajado alrededor de la sostenibilidad y el aprovechamiento de recursos naturales para distintos fines. Han aprovechado el viaje, no sólo por lo enriquecedor que per se aporta una experiencia Erasmus, como «mejorar la comunicación y aprender de otras sociedades» como nos destacaba Maia, sino descubriendo nuevos modelos sostenibles y cómo utilizarlos en nuestro entorno.
Uno de los trabajos que han presentado los alumnos ha sido un vídeo en el que interpretaban qué era y cómo ellos y ellas entendían este concepto. «Había compañeros de otros países que actuaron en sus vídeos, pero nosotros lo hicimos todo: desde la grabación, montaje, actuación... todo lo trabajamos desde el instituto», cuenta Stefan y es que se han mostrado desde el principio con un gran interés por el proyecto. De hecho, este mismo vídeo han decidido presentarlo al consistorio como un proyecto estructurado a nivel municipal, ya que gira alrededor de la remodelación del propio centro educativo siguiendo unas pautas de sostenibilidad elaboradas por los propios alumnos.
Todos están de acuerdo en que «esto ya no se trata de un proyecto de futuro. Hay que actuar ya mismo y concienciarnos ahora de los problemas que supone la contaminación o el aprovechamiento irresponsable de recursos naturales», nos contaban Adrian y Laia. Junto a demás compañeras y compañeros, también han organizado actos como Fridays for Future, que celebraron junto a diversas asociaciones ecologistas y que trata de construir la concienciación de las personas frente al ataque que sufre nuestro planeta bajo el lema «no hay planeta B». Así nos lo decía Edmilla, una de las compañeras encargadas de la organización del evento.
Lola y Vicent son los profesores que se han encargado del intercambio. Ambos han coincidido en que la experiencia ha sido muy positiva para los alumnos. No sólo han disfrutado, sino que han sido capaces de presentar proyectos interesante y curiosos como el taller de cocina sostenible. Este taller no sólo ha dado como resultado deliciosas recetas, sino que ha tratado temas como la agricultura ecológica o los nuevos modelos de producción y consumo alimentarios.
