En este CD Castellón 2018-19 cualquier cosa es posible y el proyecto de la entidad albinegra ha empezado a desmoronarse. Ayer, dos de sus piezas clave en las últimas temporadas, los exfutbolistas albinegros Ángel Dealbert y Pablo Hernández, decidieron dar un paso a un lado y desvincularse de la parcela deportova del club. Ambos, que fueron la imagen del renacer del Castellón hace año y medio, anunciaron en un comunicado que abandonan la parcela deportiva del club por «desavenencias» a la hora de planificar la próxima temporada y con el fin de «no perjudicar lo más mínimo al primer equipo». Eso sí, ambos aclararon que se mantendrán ligados a «modo accionarial» de momento y que será a final de temporada cuando valoren «el punto» en el que se encuentran dentro de la entidad de la capital de la Plana. Junto a ellos también cesan su actividad Xavi Galván, adscrito a la secretaría técnica albinegra, y Héctor Mohedo, coordinador del filial.
La noticia saltó ayer en el momento que ambos emitieron un comunicado conjunto, pero la decisión estaba tomada desde hacía al menos tres semanas cuando se reunieron con el máximo accionista, José Miguel Garrido.
Fue tras una reunión que hubo en Londres, en la que estuvieron presentes ellos dos junto al presidente del Castellón, Vicente Montesinos, integrantes todos ellos de Capital Albinegro. Allí los dos exjugadores del Castellón llevaron la voz cantante ante Garrido y, al parecer, Dealbert mostró su disconformidad con la política deportiva y por el escaso poder de decisión que él tenía, planteándole al máximo accionista la posibilidad de asumir la gestión deportiva del Castellón conjuntamente con Xavi Galván en detrimento del todavía director deportivo, Juan Guerrero. La respuesta que encontró es que no se tenía que preocupar por Guerrero y que para asumir la gestión deportiva tenía que esperar. Garrido le dijo que confía a largo plazo en él, pero por ahora no estaba dispuesto a concederle tal responsabilidad de cara al próximo curso liguero.
A Pablo Hernández, quien sigue en activo y es con diferencia uno de los mejores jugadores del Leeds United, Garrido le vino a decir que siguiera centrado en su carrera deportiva y que ya contarían con él cuando decidiera colgar las botas.
Pero, más allá de las situaciones personales de cada uno de ellos, los tres le habrían planteado la posibilidad de adquirir un porcentaje accionarial mayor que el actual para así tener mayor peso de decisión en el Castellón. Por el momento no han trascendido más datos acerca de esta posibilidad, pero cabe recordar que Garrido ya dejó claro en su día que si aparecía alguien y le devolvía todo el dinero que había invertido en el Castellón les daría paso y se marcharía.
Además de la decisión tomada, Dealbert y Pablo Hernández anunciaban que no iban a realizar ningún tipo de declaración hasta que no finalice la presente temporada y pedían a jugadores, entrenadores y afición «que nos dejemos el alma para conseguir la salvación».
Respuesta del Castellón
Minutos después de emitirse ese comunicado, el Castellón remitió otro muy escueto en el que el club agradecía a ambos «su dedicación, generosidad y esfuerzo por nuestro club» y mostraba «el respeto más absoluto a sus decisiones». «El Castellón ha sido, es y será la casa de Pablo y Ángel».
