La sección 1ª de la Audiencia de Castelló condenó ayer a un año de cárcel a un procesado por abusos sexuales a una menor. La sentencia condenatoria se produjo una vez que el procesado, de 19 años y con un grado de discapacidad mental reconocido de 50% admitió la autoría de los hechos.

La agresión sexual a la menor se produjo en enero de 2016 en el patio de un colegio, que en esos momentos se encontraba cerrado, cuando según relata el Ministerio Público el acusado sometió a tocamiento a una niña, que cayó al suelo y se lesionó.

Según el escrito del fiscal, el acusado sin antecedentes penales, « hallándose en compañía de otros dos individuos menores de edad, con ánimo libidinoso, realizó tocamientos a la víctima sobre la ropa, en el pecho y nalga». «Al caer al suelo [la víctima] resultó con lesiones consistentes en contusión en región abdominal, con equimosis a nivel de espina iliaca, que requirieron para su sanidad solo de primera asistencia facultativa, tras cinco días impeditivos de sus ocupaciones habituales, por las que no reclama».

El acusado tiene reconocido por resolución de a Generalitat Valenciana un grado de discapacidad del 53%, presentando retraso mental ligero. Inicialmente, el fiscal solicitó un año prisión y seis meses de prisión e inhabilitación especial para el ejercicio derecho de sufragio pasivo durante el mismo tiempo y libertad vigilada durante tres años.