Compromís per Castelló quiere hacer borrón y cuenta nueva y recuperar el peso político en la capital de la Plana tras los malos resultados del 26 de mayo y con la crisis interna abierta por la pérdida de un concejal, unida a la renuncia el pasado jueves de la exvicealcaldesa y actual concejala, Ali Brancal, a tomar posesión de su acta como edil de la formación para los próximos cuatro años.

La coalición, tras las tensiones vividas en la ejecutiva del 30 de mayo - en la que se instó a Brancal a dejar el acta para, entre otras coas, poder dar más libertad a Compromís en las futuras negociaciones de gobierno con PSPV y Podem- celebró ayer una una nueva asamblea para poner en común lo que la coalición considera más importante de cara en la posible negociación de un futuro gobierno de izquierdas, que pasa básicamente por determinar qué debe ser prioritario para la ciudad y cómo lograrlo.

Así, desde la Asamblea de Compromís per Castelló han determinado que lo fundamental es «poder llegar a un pacto de gobierno que permita seguir desarrollando políticas progresistas, situar a las personas en el centro y que se pongan los intereses de la ciudadanía por encima de cualquier cuestión partidista».

La asamblea de ayer estuvo presidida por Ignasi Garcia, que tenía ante sí un día complicado tras la tensión vivida hace unos días. Como se recordará, Ali Brancal, pese a estar aún con una investigación judicial abierta -que le impide asumir labores de gobierno en caso de un pacto con PSPV y Podem- mantenía su deseo de recoger el acta de edil el 15 de junio. Frente a ello, hubo varias voces -entre ellas la de Ignasi Garcia- que le recomendaron, por el bien de la formación, que renunciara, algo a lo que en principio se resistió, aunque finalmente aceptó.

Pese a la situación, la de ayer fue una asamblea que buscó asumir el varapalo judicial del 26M, sentar las bases del partido de cara al futuro y mejorar su respuesta a las situaciones de crisis. Y junto a ello, por supuesto, defender su papel como parte importante dentro de un gobierno de progreso en la capital de la Plana.

Por eso, la Asamblea de Compromís pidió «un gobierno progresista y 'aliado del Botànic' que desarrolle los próximos cuatro años las políticas que necesita Castelló». Así, en la Asamblea de Compromís se explicó, según señalaron fuentes del partido al finalizar, «la importancia de realizar un pacto de gobierno que permita seguir con las políticas valientes que han mejorado la calidad de vida de la ciudadanía».

En este sentido, se puso como ejemplo la futura residencia de gente mayor, proyectada para construir en la calle Onda, que Compromís considera 'una necesidad' llevar adelante en los próximos meses. De hecho, la Asamblea de la coalición incidió en agilizar los trámites adecuados, con la respuesta por parte del ayuntamiento a la conselleria, para que la construcción de la residencia se pueda hacer efectiva lo más bien posible.

Para llevar adelante proyectos como éste, Compromís insistió en destacar que «la colaboración entre instituciones también tiene que marcar la próxima legislatura». Por eso, la coalición afirmó que trabajará por «un gobierno valiente y aliado del Botànic que garantice unos servicios públicos dignos, de calidad y al alcance de la ciudadanía de Castelló», presionando así a los socialistas de Castelló para que sigan la senda que parece marcarse a nivel autonómico.