La dirección del centro penitenciario de Castellón I ha decidido cambiar el preso de confianza asignado al rapero Lírico, después de que el pasado fin de semana protagonizara un incidente violento, como ayer publicó Mediterráneo en exclusiva. El vocalista de Violadores del Verso se encuentra en prisión por la presunta paliza propinada a una joven de 27 años en Alcossebre.

Fuentes de Instituciones Penitenciarias matizaron que el incidente consistió en que este «soltó un bofetón» a su compañero de celda. «No fue una pelea», matizaron, añadiendo que no provocó «lesiones ni heridas».

Desde este organismo gubernamental añadieron que «se habló del tema con las partes» y se tomó la decisión de mantenerlo en el mismo departamento, por consejo médico por ser un preso recién ingresado. Por tanto, no ha sido trasladado a una celda de aislamiento. No obstante, la dirección del centro decidió cambiar al preso de confianza asignado a David Gilaberte Miguel.

El incidente, según añadieron a Mediterráneo, pudo deberse a una situación de nerviosismo, por el estado de ansiedad del momento, ya que no suele ser extraño que los presos recién ingresados sufran algún desajuste por esta privación de libertad.

Hay que recordar que Gilaberte se encuentra en el módulo de respeto de la penitenciaría castellonense y se hallaba con un preso de confianza, en aplicación del protocolo cuando los encarcelados son personas conocidas en el marco del plan antisuicidios.

Los hechos se produjeron el pasado sábado a las 14.00 horas durante el tiempo que los internos tienen para descansar y hacer la siesta tras la comida.

La agresión

Lírico, de 42 años, fue ingresado en prisión preventiva el 9 de agosto tras ser detenido en Alcossebre la madrugada del 3 al 4 por una supuesta agresión a una joven, quien presentaba graves lesiones en todo su cuerpo. Fue el propio cantante quien telefoneó al 112 para indicar que una mujer le estaba increpada y habían mantenido una discusión. Cuando llegaron los agentes, comprobaron que estaba nervioso y con sangre en las botas. Hicieron una batida por la zona y hallaron en una zanja, a 200 metros de la vivienda del detenido a la chica malherida, que fue trasladada a la UCI del Hospital General de Castelló.