El acuerdo que anunciaron este jueves Reino Unido y la Unión Europea para un brexit pactado tendrá consecuencias positivas para las exportaciones de Castellón si finalmente logra ser aprobado en el parlamento británico, algo que por el momento no está claro por la oposición al mismo de los unionistas norirlandeses. Ese pacto evitaría la imposición de aranceles al sector azulejero y evitaría sobrecostes logísticos y posibles atascos y largas colas en la frontera a los cítricos.

A la espera de lo que ocurra mañana en la trascendental votación en la Cámara de los Comunes, el empresariado castellonense se movía ayer entre el alivio y la cautela tras el anuncio realizado por Jean-Claude Juncker por la mañana. Una salida pactada permitiría al principal sector exportador, el azulejero, evitar la imposición de aranceles del 5% anunciada por el Gobierno británico en el caso de brexit duro. La patronal Ascer pedía esperar a conocer más acontecimientos antes de hacer una valoración, pero varias empresas admitían que un acuerdo siempre será mejor que una salida desordenada. Con todo, lo que más asusta no son tanto los aranceles -que serían iguales para Italia, el principal competidor-- como la caída del consumo que se pueda dar en el corto plazo.

Periodo transitorio

El pacto, de confirmarse, activaría un periodo de transitoriedad previsto en 14 meses prorrogable un año más que obligaría al Reino Unido a mantener las relaciones comerciales con sus hasta ahora socios comunitarios a la espera de pactar un acuerdo duradero de libre comercio. Para las compañías de la provincia con intereses en este país, esto supone ahorrarse toda la burocracia, los costes y los posibles atascos en la frontera.

Detallar todas esas obligaciones que lleva implícito un brexit duro fue el objetivo de una jornada organizada ayer por la oficina del Instituto Español de Comercio Exterior (Icex) y celebrada en la Cámara de Comercio.

En la misma, el responsable comercial del Eurotúnel, Manuel López, desveló que el Reino Unido solo cuenta con 400 agentes aduaneros de los 4.000 que se calculan necesarios para atender el incremento de los trámites en el caso de un brexit duro.

Además, la subdirectora general de Comercio Exterior, Alicia Sánchez, detalló que las exportaciones agroalimentarias, entre ellas los cítricos, son las que más burocracia tendrían que asumir, pues las inspecciones de los permisos aduaneros en materia de sanidad vegetal deberán realizarse tanto en origen como en destino.

Pese a las dificultades, el presidente provincial de la CEV, Sebastián Pla, animó a mantenerse en el Reino Unido.