El último informe del BBVA Research sobre la situación económica de la Comunitat Valenciana y Castelló en particular deja una de cal y una de arena. La noticia mala es que, como apuntan la mayoría de expertos, la economía se ralentiza y aún lo hará más el año próximo. La buena es que la región se encuentra, según el departamento de estudios de la entidad financiera, «mejor preparada que en otros episodios para afrontar un entorno de menor crecimiento» gracias a que los niveles de endeudamiento de familias y empresas se han reducido y el tejido económico ha ganado competitividad en los últimos años.

El final de los vientos de cola que han impulsado a la economía de Castelló el último lustro y la mayor dificultad para crecer son hechos incuestionables, y queda por dilucidar la dimensión del frenazo. En este punto, el informe de BBVA Research, que presentaron su responsable de Análisis Económico, Rafael Doménech, y el director de la Territorial Este, David Conde, prevé que la provincia y la Comunitat, crezcan un 2% este año, un dato similar al del 2018. Peor panorama se vislumbra el 2020, cuando el PIB regional moderará más su tendencia al alza hasta situarse en el 1,4%.

74.000 empleos

Aún con este crecimiento menor, el estudio prevé que en la Comunitat se creen, en los últimos meses del 2019 y el 2020, un total de 74.000 empleos. Esto situaría a la región con un paro del 13,3% cerca de los niveles precrisis pero sin alcanzarlos.

En lo que va de año, en Castelló la afiliación a la Seguridad Social ha crecido tan solo un 1%, la mitad que la media autonómica. Desde BBVA Research justificaron este dato porque el empleo público presenta un menor impulso en la provincia con respecto a Alicante y sobre todo Valencia, donde se concentran el grueso de las administraciones.

De hecho, el informe destaca las fortalezas de dos de los sectores económicos más importantes de Castelló. Respecto al azulejo, desde la entidad financiera prevén que aguante las dificultades mejor que otros sectores industriales. Y es que, a pesar de que también le afectan cuestiones como el brexit o la inestabilidad mundial, de momento no ha sido víctima directa de las guerras comerciales en forma de aranceles.

En cuanto al turismo, se afirma que la costa castellonense presenta en los tres primeros trimestres del año el «mayor dinamismo» de toda la Comunitat al ganar más de un 4% de visitantes, unos datos que coinciden con el reciente barómetro de la patronal Hosbec.

A la desaceleración en Castelló contribuyen una demanda externa e interna retraída -con menos visados para construir- y las administraciones con un bloqueo político que se traduce en un 34% menos de obra pública licitada.