Ocurrió el lunes de la pasada semana. Un operario de 49 años resultaba herido tras caer de un poste eléctrico en el camino de la Plana de Castelló. A mediados del pasado mes de octubre otro trabajador de 32 años cayó desde una altura de cinco metros en Vila-real. Y en septiembre un empleado de 51 años quedó atrapado en una máquina de una empresa del sector azulejero de Onda. Son solo algunos ejemplos recientes que ilustran un fenómeno, el de la siniestralidad laboral, que en la provincia sigue desbocado. En 2018, los accidentes en el trabajo se dispararon un 7 % en la provincia y lo peor de todo es que durante este año la tendencia es exactamente la misma: 6.233 siniestros hasta septiembre, un 11 % más que en el mismo periodo del año pasado y la cifra más alta desde 2009.

Los accidentes en el puesto de trabajo se desbocan en Castelló y para las autoridades laborales la principal explicación hay que buscarla en un aumento de la actividad económica. Y, a priori, parece lógico. Por pura ley de probabilidad, si hay un incremento de la actividad y del número de trabajadores es normal que se produzcan más siniestros laborales.

Sin embargo, el crecimiento de la actividad y del empleo no bastan para explicar el fuerte repunte de la siniestralidad. No basta porque, al menos en la provincia, el número de accidentes crece en mayor proporción que la cifra de trabajadores afiliados a la Seguridad Social. Un par de datos bastan para entenderlo: en lo que va de año, los siniestros en el tajo se han disparado un 11 %, mientras que la cifra de trabajadores solo ha aumentado un 1,6 % (de los 225. 720 a los 229.755). ¿La conclusión? Los accidentes crecen 7 veces más que el empleo.

La siniestralidad crece a una velocidad mucho más alta que el empleo y eso explica también por qué el índice de incidencia, que mide el número de siniestros que se producen por cada 100.000 trabajadores en activo, tampoco para de aumentar. Este año en Castelló se sitúa en 274,6, mientras que en 2018 fue 292,2, según datos del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.

Falta inversión en prevención

Los sindicatos se niegan a aceptar que la culpa sea solo del alza del empleo y apuntan a otros motivos. «Hay varias causas y una de ellas es la falta de inversión en prevención, algo que está relacionado con unos contratos laborales que cada vez son más cortos y que traducen en una falta de información y formación a los trabajadores», apunta Daniel Patiño, responsable de Salud Laboral de CCOO-PV. El representante sindical critica también que las evaluaciones de riesgos no resultan exhaustivas. «La planificación de la actividad preventiva no es lo efectiva que debería», añade.

Marisa Baena, secretaria de Salud Laboral, Medio Ambiente y Cooperación de UGT-PV, incide en que falta prevención. «La prevención en riesgos laborales ha dejado de ser una inversión para convertirse en un gasto», explica. Baena apunta a la necesidad de que las empresas cumplan con la legalidad y también denuncia la falta de medios tanto del Invassat como de Inspección de Trabajo.

En todos los sectores

La curva ascendente se repite en prácticamente todas las comarcas de Castelló y en todos los sectores económicos, aunque la construcción se lleva la palma. De hecho, en los últimos doce meses (de octubre del 2018 a septiembre de este año), los accidentes laborales en el sector del ladrillo han aumentado un 32,98 %, según las últimas cifras del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo (Invassat). La siniestralidad en la agricultura y la industria también ha crecido, pero bastante menos, un 6,24 y un 5,63 %, respectivamente.

Para hacer frente a los altos índices de siniestralidad laboral, el Invassat llevó a cabo en los seis primeros meses de este año una campaña extraordinaria de prevención en el sector de la construcción. Y el resultado no puede ser más llamativo. En toda la Comunitat Valenciana, los técnicos del Instituto de Seguridad visitaron 331 obras de construcción y se detectaron riesgos graves en 254, es decir, el 76,74 %. Los principales peligros de seguridad detectados fueron caídas en altura y utilización de máquinas.