El malestar en Castelló por el retraso o errores en el cobro de las prestaciones por ERTE o la dificultad para acceder al ingreso mínimo vital, que solo se tramita por vía telemática, parece que no son únicamente propios del volumen imprevisto que ha generado el covid-19. El informe del Síndic de Greuges apunta que en el 2019 los ciudadanos de la Comunitat manifestaron sus quejas por demoras en el cobro de ayudas públicas (dependencia, vivienda, sanidad o inclusión).

El sindicato USO remitió ayer un escrito al Ministerio de Trabajo con un listado de irregularidades y errores de tramitación por parte del SEPE en las prestaciones por ERTE. «Son trabajadores con los ingresos mermados, que sufren aún más por el retraso en el ingreso o errores en su cálculo o dato», puntualizaron.

Y sobre el ingreso mínimo vital (IMV), los trabajadores sociales de la Comunitat también recuerdan el deber del Estado y alertan que «el tercer sector nunca debe sustituir al sistema público que garantiza el Estado de Bienestar y mucho menos con personal voluntario», en alusión al anuncio de Cruz Roja de ayudar a los solicitantes a tramitar el ingreso, pues la única vía es internet. Otro frente de quejas en Castelló, el colapso judicial, ayer se compensó con el anuncio de un juzgado.

MAL ENDÉMICO

La falta de refuerzos y personal es clave para reforzar el sistema. El Síndic denuncia que los plazos se exceden «de forma escandalosa, por acostumbrada», en asuntos «tan básicos» como la renta valenciana de inclusión (menos «significativo» en Castelló --por la menor población--), vivienda, atención a la discapacidad o a la dependencia, prestaciones de emergencia, sanitarias o de inclusión. En el 2019 se tramitaron 4.528 quejas, 33 de oficio, y 11.923 consultas.

La consellera de Igualdad, Mónica Oltra, defendió el progreso en servicios sociales en la Comunitat en los últimos años. Justo ayer el pleno del Consell aprobó por decreto compatibilizar la renta valenciana y el ingreso mínimo vital. Quien se acoja al ingreso, si es más alto, no perderá la titularidad de la renta si desapareciera el primero. El remanente «ayudará a llegar a más familias con la paga autonómica».

MÁS DE 4.000 SOLICITUDES DE LA NUEVA PAGA EN DIEZ DÍAS

La Seguridad Social abonó ayer el primer pago del ingreso mínimo vital (IMV) a 9.271 familias de la Comunitat, la segunda con más hogares beneficiados (donde residen 31.000 personas, más de la mitad menores). En concreto, en Castellón han abonado 965 ayudas, 3.963 en Alicante y 4.343 en Valencia. Desde el inicio del plazo, en los primeros diez días, Castelló registró 4.363 solicitudes, 16.388 Alicante y 20.699 Valencia (41.450 en la Comunitat).

Desde la Delegación del Gobierno recuerdan que los ciudadanos se pueden informar sobre el ingreso mínimo vital a través de la página web de la Seguridad Social ('www.seg-social.es') y mediante el nuevo asesor virtual, ISSA. También disponen de una herramienta de simulación, donde pueden comprobar si cumplen los requisitos, y de una línea de teléfono para realizar consultas concretas (900 20 22 22), que funciona de 8.30 a 20.30 horas.

BRECHA DIGITAL Y REFUERZO DE PERSONAL

Los funcionarios de Empleo y Seguridad Social han manifestado en numerosas ocasiones su impotencia para atender el volumen de ERTE y verificación de nuevas solicitudes del ingreso mínimo. Medios humanos, técnicos y formación son algunas demandas.

Buena parte de los solicitantes de ayudas del covid-19 son familias con pocos recursos económicos que no siempre tienen internet. En el caso del ingreso mínimo vital, Cruz Roja se ha ofrecido a contactar telefónicamente y asesorarles.