Un bebé de 10 meses de edad ha fallecido -estaba en estado de muerte clínica en el Hospital General de Castelló- como consecuencia de la brutal agresión sufrida supuestamente a manos de su padre, que está detenido, al igual que la madre. El caso se destapó cuando llevaron al niño al centro de salud, desde donde lo enviaron al citado centro hospitalario. Fueron los pediatras de este último quienes dieron la voz de alarma porque la gravísima lesión era impropia de un accidente y ya había un expediente por unos posibles malos tratos anteriores. Según la información a la que ha tenido acceso Levante-EMV, los hechos sucedieron a última hora de la mañana del domingo, en una casa ubicada en la calle San Pedro de Almassora, en la que residen los padres del bebé y el pequeño. Según la investigación abierta por la Comandancia de la Guardia Civil de Castelló, habría sido el padre, de 20 años de edad, quien habría golpeado con fuerza al niño contra los barrotes de la cuna porque estaba llorando, posiblemente por lesiones anteriores que le provocaban dolor, según estiman los pediatras. De hecho, en la revisión a la que fue sometido el menor nada más llegar a las urgencias del Hospital General de Castelló, los médicos apreciaron hematomas y lesiones infligidas en distintos momentos, lo que prueba que el menor ha sido objeto de malos tratos desde hace meses. En cuanto los padres se dieron cuenta del alcance de la agresión, acudieron al centro de salud y más tarde al hospital, pero no dijeron la verdad.

Aseguraron que el niño se había caído de cabeza de la cuna, extremo que los médicos no creyeron, ya que la fuerza del impacto denotaba un golpe externo imposible de producirse con una simple caída, dado el peso del bebé y la altura de la cuna. Así las cosas, alertaron de inmediato al juzgado de guardia y este, a su vez, a la Guardia Civil, que envió varias patrullas al centro sanitario. Los padres, él de 20 años, y ella, de 17, fueron detenidos de inmediato por un presunto delito de asesinato en grado de tentativa en el ámbito familiar. El niño ha sido intervenido de urgencia, pero las lesiones son irreversibles, por lo que los médicos no albergan ninguna esperanza de que pueda sobrevivir a la brutal agresión, que le provocó hundimiento craneal. Esa misma tarde, agentes de Policía Judicial y de Criminalística de Castelló se desplazaron a la vivienda de la pareja arrestada y realizaron una exhaustiva inspección ocular que incluyó la toma de muestras en los barrotes de la cuna del bebé para confirmar que fue ese el objeto contra el que golpeó al pequeño.