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Vecinos y autoridades de Benissa salieron masivamente ayer a la calle para protestar por la paralización de las obras de la variante de la N-332. Según fuentes municipales, la construcción de esta circunvalación, que depende del Ministerio de Fomento, se interrumpió hace un año porque la empresa adjudicataria del proyecto quebró. Esta situación provocó desprendimientos y corrimientos de tierra, con el consiguiente riesgo y molestias a los vecinos. Desde el consistorio se recordó ayer que tras varias reuniones con Fomento y reiteradas interpelaciones, no se ha obtenido la respuestas esperada.

La manifestación partió de la Plaça Portal y concluyó en Rector Salvador Fuster. Allí se ha instalado una pancarta con un contador diario para denunciar el tiempo que transcurre entre la manifestación y el inicio de las obras. Si se superan los 100 días, habrá concentraciones.