Los promotores que impulsaban la construcción del Centro Comercial Vilella de Alzira, una obra paralizada desde hace quince meses, no podrán acabar el proyecto. El próximo 30 de junio finaliza el plazo que habían pactado con Bancaixa para obtener un crédito de otra entidad bancaria o el respaldo de algún grupo inversor que permitiera retomar las obras, pero ninguna de las gestiones realizadas por los empresarios alcireños ha fructificado y la posibilidad de dar continuidad al proyecto queda ahora en manos de la caja de ahorros."Nosotros no tenemos financiación y no podemos continuar", indicaron ayer fuentes de la empresa promotora, que señalaron que así se lo han comunicado verbalmente a Bancaixa y así se lo notificarán hoy de forma oficial, cumpliendo los plazos estipulados. Se da la circunstancia que Bancaixa es ya formalmente a través de su filial Cartera de Inmuebles (CISA) la titular de la obra construida. La entidad llegó a un acuerdo con los promotores el año pasado por el que se quedaba el inmueble a cambio de la deuda, en una operación de compraventa que se cifró en torno a los 46 millones de euros. Desde la firma Centro Comercial Vilella señalaron ayer que se habían reservado una opción de compra que vence el 30 de junio y que la empresa no ejecutará.
