La subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares, afirmó ayer que es "irresponsable" adjudicar un proyecto cuando los informes preceptivos son negativos. Se refería al proyecto del ascensor del castillo de Dénia, que se financia con 300.000 euros del segundo Plan E y cuyas obras el gobierno local (PP, Centre Unificat, Gent de Dénia, PSD y el tránsfuga Juan Collado) ya ha adjudicado, pese a que el dictamen de la Dirección de Patrimonio (Conselleria de Cultura) es desfavorable. Llinares advirtió que el Ayuntamiento de Dénia, si el informe preceptivo de Patrimonio sigue siendo negativo, podría perder la financiación estatal. El castillo del siglo XI está declarado BIC y de ahí que cualquier obra necesite de autorización de la conselleria.

Llinares lamentó el retraso en las obras del Área Integral de Rehabilitación (ARI) de les Roques. Recordó que el proyecto debía acabarse en 2011, pero se ha modificado el convenio y el plazo se ha estirado hasta 2013. "Tengo que lamentar la demora en rehabilitar un barrio tan emblemático", dijo, y aseguró que el Gobierno ha aportado 768.000 euros sin que la Conselleria de Vivienda haya justificado todavía en qué se han gastado.