"Todo esto me ha afectado mucho, estoy muy triste" relató el cura de Ròtova al ser preguntado por Levante-EMV. "Me he pasado la noche sin dormir, rezando y llorando". Víctor Jimeno señala que ante la actitud del festero perdió totalmente la racionalidad. El párroco manifestó que reconoce que es difícil hacer entender lo ocurrido a la gente que no es religiosa. "Es como si invitaras a comer a tu casa a un amigo y tu madre le prepara la comida y éste tira el plato al suelo y la desprecia".

El cura incidió en que sólo desde el cristianismo se puede comprender el significado de lo ocurrido con el cuerpo y la sangre de Cristo y ante sus pies: "es lo peor que le pueden hacer a un creyente" añadió. Después reconoció cómo fue el intercambio de golpes y también que se dirigió a la feligresía y pidió perdón "al joven, a su familia y a todos". Respecto a si realmente el festero rompió la hostia ante él o se la guardó en el bolsillo (versión que circulaba a última hora por la localidad de la Safor) el párroco señaló que tenía como testigos al juez de paz, Vicente Balbastre, y a otro feligrés que corroboraban que el chaval rompió la sagrada forma ante todos ellos. Ayer, el cura de Ròtova recibió la visita de otro sacerdote de la zona para poder confesarse tras la pelea. Tras ello se pasó todo el día descansando en su casa, lejos del bullicio de los festejos y con un cuadro de ansiedad y depresión.

En el libro de las fiestas del pueblo de este año, al final de un artículo, el párroco escribía a sus vecinos:

"Estimats tots, Sant Bertomeu Apo?stol vos protegeix des del Cel. Els xiquets quan vénen a l'Esgle?sia o a la catequesi em pregunten per què Sant Bertomeu du un gavinet a la ma?, sempre conteste: 'Es per espantar al pensaments dolents i que se'n vaja ben lluny de nosaltres i del nostre poble'. Que aquestos dies de Festa siguen per a tots dies de trobar-se i sentir-se felic?os al cor. Que el Senyor i la Nostra Mare ens Beneisca!!". v. x. c. ròtova