"¿Cómo se pudo dejar que salieran libres unas personas que estaban acusadas de asesinato?". La madre de Klaus, María Gervasi, no logra comprender por qué un caso claro de asesinato tarda más de ocho años en llegar a juicio. "A mi me quitaron a mi hijo, pero los culpables están en la calle. De verdad que no lo entiendo", afirma.

Maria y su hija Kerstin Gervasi, quien tenía 19 años cuando murió su hermano, sólo quieren que, por fin, se haga justicia. "Nos da mucha rabia que el juicio se retrase más y más. No vemos el final", lamenta Kerstin. Ambas relatan que cuando Klaus murió su compañera estaba a punto de dar a luz. No llegó a conocer a su hijo, a quien, dado que todavía es pequeño y que el juicio por el asesinato de su padre no llega, no se atreven a contarle la verdad sobre la muerte de Klaus y, simplemente, le dicen que falleció en un accidente.

La notificación de ayer a los imputados de la apertura del juicio con jurado popular parecía ya un trámite definitivo. Pero ahora dos de los implicados están desaparecidos.

La Fiscalía de Alicante, en su escrito de acusación, pedía 25 años de prisión para uno de los dos presuntos autores de la muerte de este joven alemán. El otro, para el que también se reclamaba la misma pena, es el que ya ha fallecido. Para los otros dos acusados, la fiscalía pedía cinco años de cárcel por un delito de lesiones. a. p. f.dénia