El buceador Jean Castera se ha convertido en un colaborador excepcional del Museo de Dénia. Hace unos días descubrió a unos 700 metros de la costa, en la playa de les Marines, los restos de una embarcación hundida de la primera mitad del siglo XIX. El pecio está a unos tres metros de profundidad y su importancia reside en que "la arquitectura náutica" de esta nave, que debió tener uso comercial, está "perfectamente conservada". Así lo subrayó ayer el arqueólogo municipal y director del Museo de Dénia, Josep Antoni Gisbert. La embarcación procedería de las costas de Andalucía o Murcia y encalló en Dénia. Sus tripulantes tuvieron tiempo de vaciarla antes de que se fuera a pique. En el pecio, eso sí, se han encontrado restos de cerámica y una vieja botella de ginebra.

Gisbert destacó la riqueza arqueológica del litoral de Dénia donde hay localizados más de 70 barcos hundidos; los más antiguos son de época romana.