Arturo Torró, alcalde de Gandia, adelantó ayer un pellizco de la auditoría que su gobierno ha encargado sobre la gestión económica de su predecesor, José Manuel Orengo. Y el resultado no ha podido ser más explosivo.

Torró, acompañado del concejal Javier Reig, anunció que el próximo lunes o martes presentará a la Fiscalía de Valencia toda la documentación sobre el proyecto del Edificio Innova, paralizado desde hace meses, al considerar que en la gestión de una subvención de 5,1 millones de euros el anterior alcalde cometió delitos de malversación de caudales públicos, falsedad documental y fraude a la hacienda pública.

Torró y Reig acusan al anterior Gobierno local de haber urdido una trama con la empresa municipal Iniciatives Públiques Gandia (IPG) para desviar un crédito 3,4 millones de euros que necesariamente se tenía que invertir en el Edificio Innova.

La operación, siempre según los dos representantes municipales, consistió en derivar el dinero de la subvención a IPG, a la que el Gobierno de Orengo previamente había autorizado a gestionar la construcción del Edificio Innova. En vez de hacer eso, IPG retornó los 3,4 millones nuevamente al ayuntamiento mediante la compra de parcelas. Por eso, en los delitos citados también estaría implicado el Consejo de Administración de IPG, así como el gerente, Andreu Ferrer.

"Es un sistema perverso de lavado de dinero", señaló el alcalde, quien, para dar solidez a su acusación, aportó facturas presuntamente falsificadas destinadas a pagar las obras del Edificio Innova. Esos documentos son de dos años antes de que estas empezaran. Torró añadió que todavía no sabe qué hizo el ayuntamiento con el dinero de la subvención, aunque sospecha que se destinó al gasto corriente.

"Es lo mismo que el caso Marbella", señaló la primera autoridad municipal, refiriéndose a la trama corrupta cuya envergadura sorprendió a toda España.

Por su parte, José Manuel Orengo, exalcalde de Gandia, no se mordió la lengua al referirse a este hecho. "Torró ha tratado de crear, como alcalde y por interés político, una mentira y una cortina de humo con una denuncia falsa montada por su mafia".

El líder socialista recriminó a Torró que saliera a lanzar esa acusación "el primer día de la campaña electoral" y, además, sin siquiera haber convocado a los concejales socialistas para que pudieran aclarar las dudas.

Orengo añadió que Torró "no está a la altura de las circunstancias" y le pidió "que no retire la denuncia ante la Fiscalía" porque con ella "va a hacer el más absoluto de los ridículos".

Orengo se preguntó "si dimitirá cuando se demuestre que todo es falso".