El homenaje póstumo al recortador de Canet Juan Ramón Soler, "Majín", llenó ayer y enmudeció por momentos la plaza de las fiestas del Port de Sagunt. Más de 4.000 personas acudieron a esta cita que reunió a una veintena de compañeros de profesión de "Majín" y en la que sus familiares más próximos no pudieron contener la emoción.Luciendo camisetas con el lema "Majín, siempre con nosotros" , recortadores de los dos núcleos de Sagunt, Puçol y Cheste demostraron su respeto y cariño hacia este compañero cuya reciente cogida mortal causó una fuerte conmoción.