Un animal falleció durante los festejos taurinos celebrados este sábado en Alboraia. Se trataba del último toro de la noche, que murió, según algunos testigos, alrededor de las dos de la madrugada. El astado formaba parte de la ganadería de los hermanos Benavent de Quatretonda. Durante la noche, los festeros y aficionados había embolado otros dos animales, al parecer sin problemas, cuando llegó el turno con el que se iba a cerrar la noche.

Según testimonios recogidos por este periódico, el toro falleció antes de que los embolaran. Al parecer, el animal murió poco después de salir del cajón, cuando estaba atado y cogido por los aficionados. Según los testigos todo apunta a que el animal se desnucó cuando la cuerda se tensó, debido a la gran fuerza aplicada por el astado.

Por su parte, el presidente de la Federación de Peñas de Bous al Carrer, Modesto Martínez, atendió a este diario y explicó que desconocía que el animal hubiera muerto. «Todo pasó muy rápido, parece ser que se pegó un golpe. Pero sólo se quedó conmocionado y lo volvieron a meter en el corral», añadió.

Siete toros muertos desde agosto

Durante las fiestas taurinas celebradas en diversos municipios de la Comunitat Valenciana desde agosto han fallecido un total de siete astados por diversas causas, los tres últimos en septiembre en Museros y Puçol.