Los accesos a Ikea dejan aislados el marjal de Massanassa y la cooperativa

La recién anunciada llegada de Ikea a Alfafar podría verse en peligro en caso de que no se solventase el problema detectado por los agricultores en el plan de accesos que aprobó el Ministerio de Fomento: tanto la Cooperativa Agrícola de Massanassa como el marjal de esa localidad quedan aislados con la nueva reordenación viaria que se prevé ejecutar en la zona. El proyecto es condición sine qua non para poder abrir Alfafar Parc pero, si no se corrige, los afectados están dispuestos a llegar adonde haga falta, incluso a presentar un contencioso-administrativo, lo que paralizaría el plan de accesos y, por ende, Ikea. El problema no es nuevo. Se descubrió en marzo de 2011, cuando se presentó el nuevo plan de accesos, diseñado tras años de estudios y rectificaciones. En aquel momento, los agricultores ya advirtieron de que el proyecto anulaba las entradas actuales a la cooperativa y a los campos de labor del marjal -un paso fundamental en septiembre para las cosechadoras- sin ofrecer ninguna alternativa. Según la nueva reordenación, el acceso al parque comercial de Alfafar a través de la V-31 (Pista de Silla) se hará por lo que hoy sólo es la salida a Massanassa. En la actualidad, la vía enlaza con el camino rural -el Camí de Castellar- que pasa frente a la cooperativa.

El Ministerio de Fomento anotó la queja en aquel momento y explicó a los afectados que no se podía añadir ningún acceso porque el objetivo del proyecto es encauzar y dar fluidez a un gran volumen de vehículos y que, para conseguirlo, resulta imprescindible que el vial no cuente con más incorporaciones. No obstante, se comprometió a buscar una solución que no dejase aislado el recinto agrícola ni los campos de labor pero por ahora no ha sido así.