Gandia investiga un posible sabotaje en el despacho de UGT en el consistorio

Hace tiempo que los representantes de UGT en el Ayuntamiento de Gandia tenían la mosca detrás de la oreja, según reconocían ayer, y ahora se han confirmado sus temores. El despacho que la organización sindical tiene en la planta baja del edificio municipal de la calle Carmelites, donde estaba el mercado, podría haber sido objeto de un sabotaje. Aunque reconocen que tienen alguna sospecha, UGT dice desconocer cuáles pueden haber sido los móviles o los autores, pero el concejal responsable de la Policía Local, Javier Reig, ya les ha trasladado que se va a abrir una investigación. Además, la Federación de Servicios Públicos de UGT en la Safor, Andrés Bertó, interpuso ayer mismo una denuncia en la comisaría de la Policía Nacional.

La certeza de que su despacho ha sido saboteado le llegó al sindicato la semana pasada, cuando acudió al mismo un técnico de la empresa que gestiona el sistema de alarma debido a que éste comunicaba algún tipo de fallo. Cuando el profesional quitó la escayola para revisar el cableado, vio que estaba cortado el de la alarma y el del sistema de detección de humos.