No tendrán móvil a cargo del ayuntamiento y tampoco llaves de los que hasta el viernes eran sus despachos. La alcaldesa de Benetússer, la popular Laura Chulià ha cortado las líneas telefónicas al que era su número dos, Luis Adell, así como a los ediles Ambrosio Andreu y María José García, y también les ha enviado un requerimiento para que entreguen las llaves de los que eran sus despachos. En la misma notificación que les remitió para comunicarles que estaban destituidos de sus funciones en el gobierno local el viernes, como ayer publicó Levante-EMV, les instó a que entregaran las llaves y los terminales, al tiempo que daba la orden para que se bloquearan las líneas.
Chulià utilizó a la Policía Local para comunicar a los tres concejales su destitución -los mismos que hace una semana votaron en contra del resto del gobierno local un punto del pleno- y lo hizo en plena inauguración de la feria comercial, según diversas fuentes. Para ello consultó antes al secretario del ayuntamiento y al jefe de Policía Local. La mandataria asegura que los tres "se negaron" a devolver llaves y teléfono pero "ha quedado constancia en la notificación". "Dijeron que el lunes decidirán si los entregan", matizó.
En cuanto a las llaves de acceso a los despachos, Chulià asegura que se quedarán depositadas en dependencias policiales hasta que los tres ediles díscolos "comuniquen oficialmente" que quieren entrar a por sus efectos o archivos personales "acompañados de personal municipal". Hasta ese momento, "nadie entrará en estos espacios" y a posteriori "se volverá a normalizar el uso".
Laura Chuliá reconoció ayer que "hace meses" que Luis Adell no le dirigía "la palabra" aunque ella intuía "sus jugadas" en asuntos como el informe sobre las deficiencias en el centro cultural, que realizó la Policía Local "por orden superior" o incluso en alguna que pudiera haber preparado relativa a la feria.
La mandataria aseguró ayer que "muchos vecinos, militantes y simpatizantes" la felicitaron por la calle y le dijeron que "tenía que haberlos destituido el primer día" que comenzaron los desencuentros.
Para la alcaldesa, lo "honesto" sería que Adell, Andreu y García "dimitieran como concejales" porque "han demostrado que no están en la línea ni del grupo municipal ni del partido".
Si deciden seguir en la corporación como ediles no adscritos, el gobierno local -una coalición inicial entre los ocho ediles del PP y uno del CDL- quedarán en minoría frente a los seis escaños del PSPV, los dos concejales de EU y tres los posibles tránsfugas.
Sanz cree que Chulià "ha perdido las formas" y Aguar augura una batalla campal
La exalcaldesa de Benetússer y actual portavoz del PSPV, Eva Sanz, considera que la ruptura se debe a "cuestiones internas del PP y temas personales" sobre los que prefiere no pronunciarse, aunque critica que Laura Chulià "ha perdido las formas" al enviar a la Policía Local a notificarlo en plena feria. Con todo, augura que los ediles pasarán a ser no adscritos por lo que el PP perderá la mayoría "y podremos volver a aprobar en el pleno propuestas de izquierdas y reconducir cosas". Para EU, esta crisis "va a perjudicar a los vecinos" porque "el ayuntamiento está paralizado. El edil Josep Manel Albiol asegura no haberse sorprendido porque "hace tiempo que se rumoreaba y la alcaldesa nos confesó un día los problemas en su grupo". Por su parte, el socio de gobierno del PP, el exalcalde José Enrique Aguar, del CDL, augura una "batalla campal" si los ediles díscolos no dejan el acta aunque asegura que su grupo "velará para que no afecte a los proyectos más importantes ni a los vecinos. "Ahora la alcaldesa tendrá que hacer más esfuerzo de consenso", dijo Aguar.
