El alcalde de Xeraco, Avelino Mascarell, no quería hablar ayer de una «guerra» con el Ayuntamiento de Gandia se le parece mucho. Mascarell, con el respaldo de todos los grupos políticos municipales, ha procedido a cortar el acceso en coche a la Playa Can de Gandia, un espacio acotado y habilitado hace apenas diez días por el ayuntamiento de esta ciudad en la que se permite la presencia de perros con sus propietarios. Es, de hecho, la primera playa apta para canes de toda la Comunitat Valenciana, y el domingo pasado ya se demostró que es todo un éxito.
El corte del camino de la Torre de Guaita, por el que se llega a la Playa Can, se ha producido en la rotonda situada en la carretera Nazaret-Oliva, dentro del término de Xeraco, de manera que Gandia no puede retirar los pivotes.
Pero no queda ahí la cosa. El rechazo de Xeraco a la presencia de una playa apta para perros que linda con su término y con su playa también ha quedado reflejado con la prohibición expresa de que los canes, con sus dueños, puedan llegar a este espacio a través de la arena de la playa de Xeraco. Un cartel colocado ayer lo anunciaba: «perros no, sanción máxima». Así, quienes quieran llegar a la Playa Can solo tienen la opción de acceder por el camino de la Torre de Guaita, pero a pie o en bicicleta.
La actitud del alcalde de Xeraco no es fruto de un arrebato. Un pleno celebrado hace más de un mes aprobó una moción presentada por el grupo del PP y apoyada por el PSPV-PSOE y Compromís, que «rechaza» la Playa Can por motivos de «insalubridad», porque «puede afectar a la calidad de las aguas de Xeraco, que disfruta de Bandera Azul», y porque ese espacio apto para animales está junto a la desembocadura del río Vaca, un espacio natural y zona húmeda especialmente protegida que está incluida en la Red Natura 2000 de la Unión Europea.
El Ayuntamiento de Xeraco se dirigió a la demarcación de Costas de Valencia solicitando que no se autorizara la Playa Can «por los perjuicios al municipio y por las repercusiones ambientales».
No obstante, ayer, a preguntas de Levante-EMV, el alcalde de Xeraco negó que el cierre del camino se haya llevado a cabo por la Playa Can. «Lo habíamos previsto hace tiempo porque forma parte de una vía cicloturista y ambiental a lo largo del río Vaca», y porque han detectado que los domingos jóvenes van allí con sus vehículos «para hacer botellones», algo que no está permitido y que causa molestias a los vecinos.
Ayer, cuando se dirigían a la Playa Can, los usuarios mostraron su sorpresa por el cierre. Otros accedían a la playa con sus perros desde Xeraco pese al cartel.
En Gandia, además de sorpresa, la actitud del alcalde de Xeraco ha causado malestar. Arturo Torró, alcalde de la ciudad e impulsor de este proyecto que pretende incrementar la oferta turística de la capital de la Safor, mantuvo varias conversaciones con Mascarell para transmitirle su rechazo al corte del camino.
