La playa para perros de El Campello no termina de convencer a los vecinos de la cala de la Punta del riu Sec.

La convivencia entre los dueños de las mascotas que acuden allí para bañarse y los usuarios que van sin canes está siendo cada vez más complicada. Los residentes se quejan de la falta de higiene que presenta la playa y de la suciedad que generan los animales, ya que muchos dueños no recogen las heces de sus mascotas.

Los bañistas que llevan a sus perros aseguran que cumplen la ordenanza municipal y piden a los vecinos comprensión.

El inconveniente es que esta cala es de piedras y aunque la mayoría recoge los excrementos de sus mascotas, siempre queda suciedad en las rocas que, unida a la orina, convierte este zona en un sitio poco apetecible para darse un chapuzón.

«Esta playa tiene un sello de calidad certificado, ha pasado de ser un sitio ideal para familias a un lugar sólo para perros. La suciedad que dejan genera un foco de infecciones tremendo. Lo que nos preocupa es la falta de limpieza pues el agua se regenera, pero las heces que se quedan en el resto de la cala y ¿quién las limpia?», lamenta Sonia, una vecina que vive a sólo unos metros de la cala.

El problema se ha llegado a convertir en una auténtica lucha. Tanto que la policía recibe a diario llamadas de vecinos quejándose por molestias con los canes y, sobre todo, por la suciedad que se ha generado desde que se inauguró esta zona el pasado 24 de junio.

Los residentes no quieren perder esta zona y muchos siguen yendo a bañarse. Quienes lo hacen deben saber que la ordenanza autoriza a los dueños a llevar sueltos a los animales, excepto aquellas razas que la Generalitat establece como potencialmente peligrosas como el doberman, bullterrier o rottweiler, entre otros.