Más de medio centenar de personas tomó ayer el Ayuntamiento de Alfafar para intentar obligar al alcalde a que la cooperativa de limpieza del barrio Orba (también conocido como Parque Alcosa) siga encargándose del aseo de la barriada. El mandatario, Juan Ramón Adsuara (PP), decretó este verano la extinción del convenio que, desde hace años, sustentaba con fondos municipales la actividad de la cooperativa. El servicio saldrá a licitación en breve. Pese a que los vecinos, procedentes de Orba y en su mayoría cercanos a la Koordinadora de Kolectivos -entidad matriz de la cooperativa-, consiguieron acceder ayer al consistorio y quedarse en él más allá de la hora del cierre (establecido a las 14.30 horas hasta mediados de septiembre), finalmente optaron por abandonar el edificio sobre la 20.30 horas .

La salida se produjo después de que la cooperativa consiguiese que "el subdelegado del Gobierno accediera a decirle al alcalde que retire el decreto y abra una negociación" con el colectivo, indicó Antonio Valero, portavoz de la Koordinadora. En caso contrario, anunció, "la semana próxima habrá una manifestación y se iniciará una huelga de hambre". La convocatoria de estos actos, previstos para el jueves próximo, "se mantiene activa hasta ver qué pasa estos días".

Interceptados por la policía

El asalto se pr0dujo a las 13.30 horas de ayer en lo que, en principio, iba a ser una concentración ante la puerta del Ayuntamiento de Alfafar, que se encuentra sumido en las fiestas patronales. Los participantes intentaron acceder en masa al consistorio, pero fueron interceptados por el alcalde y la Policía Local, que únicamente permitió su estancia en el hall.

Previamente, en el interior del edificio se habían vivido algunos minutos de agitación. El equipo de gobierno había ordenado cerrar todas las dependencias susceptibles de ser ocupadas (sala de reuniones, alcaldía, etc) por expresa recomendación de los agentes. Tan sólo quedaron abiertas las áreas diáfanas de atención al público.

Los manifestantes de la Koordinadora y la cooperativa social de limpieza, acompañados por ediles de EU y el PSPV, intentaron acceder al consistorio con el pretexto de "querer hablar con el alcalde de manera urgente". Juan Ramón Adsuara, que también se encontraba en el vestíbulo, se prestó a atenderlos pero de manera individual, a lo que se negaron hasta que, finalmente, todos acabaron enzarzándose en un encendido debate.

Al menos ocho personas de la Koordinadora acusaron de varias formas al mandatario de querer destruir la cooperativa. Adsuara, por su parte, les explicó que se habían "recibido quejas" del aseo en Orba y les animó a que la entidad se presentase al concurso. El alcalde también les aseguró que un requisito de la próxima convocatoria será que el adjudicatario "subrogue a los trabajadores y contrate a gente de Orba". Algunos de los asistentes dijeron "no creer" en las palabras del alcalde y, en cuestión de cinco minutos, unos gritaban "¡No al decreto!" y otros pedían silencio "para hablar". Su principal exigencia era "la derogación del decreto" que da por extinguido el convenio entre el ayuntamiento y la cooperativa de limpieza y la apertura de "una negociación" entre ambos. El mandatario les contestó que llevaba "dos años hablando" con la Koordinadora y que estaba actuando "de manera totalmente legal".

Tras media hora de acalorado intercambio de palabras que no dieron ningún fruto, Adsuara dio por concluido el encuentro y se marchó, mientras los manifestantes anunciaron su intención de acampar dentro del ayuntamiento.